MADRID, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha firmado este martes una orden ejecutiva mediante la cual amplía durante un año más la emergencia nacional con respecto a Malí y Líbano.
En el caso de Malí, la emergencia nacional declarada fue adoptada el 26 de julio de 2019 para "hacer frente a la amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos" en el país africano.
En este sentido, ha argumentado que continúa esta misma situación y ha apuntado la necesidad de continuar con la emergencia nacional por "las repetidas violaciones de los acuerdos de alto el fuego", "la expansión de las actividades terroristas", "la intensificación del tráfico de drogas y de personas", así como "los abusos de los Derechos Humanos" y "la intensificación de los ataques contra la población civil, fuerzas de seguridad y miembros de organismos internacionales".
En lo que respecta a Líbano, la emergencia nacional declarada fue adoptada el 1 de agosto de 2007 para "hacer frente a la amenaza para Estados Unidos que constituyen las acciones de determinadas personas que buscan socavar el Gobierno democrático de Líbano".
Entre esas personas, ha señalado directamente a "injerencias de Siria" y a "las continuas transferencias de armas de Irán a Hezbolá". Para el país norteamericano, estas acciones contribuyen "a la inestabilidad política y económica en la región".
