RANGÚN, 25 Sep. (EP/AP) -
Las autoridades birmanas ordenaron hoy a los monjes budistas que encabezaron las mayores marchas antigubernamentales en cerca de dos décadas que se mantengan fueran de la política, al tiempo que admitieron a través de medios oficiales que estas manifestaciones se han generalizado por todo el país.
Tras la marcha que el día anterior congregó a más de 100.000 manifestantes, las autoridades recorrieron hoy con coches las calles de Rangún advirtiendo a los clérigos que no deben tomar parte directa en "asuntos seculares" y aseverando que algunos elementos tratan de instigar al resto del país.
El diario 'New Light of Myanmar', próximo al Gobierno, citó al ministro de Asuntos Religiosos, comandante general Thura Myint Maung, quien declaró que las protestas de los monjes también se extendieron a otras ciudades como Mandalay, Hinthada y Monywa, en siete de los 14 estados y divisiones del país.
Las autoridades no han interferido en las manifestaciones que han pasado en solo una semana de ser un movimiento marginal a convertirse en una manifestación masiva que convocó a monjes y civiles.