BANGKOK, 16 Nov. (EP/AP) -
El informador especial de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU) enviado a Birmania, Paulo Sergio Pinheiro, anunció hoy que en su misión de cinco días en el país ha podido determinar el número de muertos y detenidos durante la violenta represión de las protestas ejercida por la Junta militar y adelantó que revelará las cifras en dos semanas.
Pinheiro terminó hoy su misión en Birmania que consistió en investigar las acusaciones de abusos cometidos por las autoridades para dispersar las manifestaciones, determinar el número y el paradero de los detenidos y los muertos y recolectar testimonios sobre lo ocurrido. Ahora, Pinheiro deberá elaborar un informe y presentarlo a la ONU, antes de hacer públicas sus conclusiones.
Según la Junta militar que gobierna el país, 10 personas murieron cuando las tropas abrieron fuego para disolver las manifestaciones pacíficas en favor de reformas democráticas. Sin embargo, diplomáticos y disidentes aseguran que la cifra de muertos es mucho mayor. La Junta también admite haber detenido a 3.000 personas, aunque dice que la mayoría han sido liberados.
"Por supuesto que estoy satisfecho de que se haya puesto en libertad a un gran número de personas, pero estoy preocupado por la situación de aquellos que no han sido liberados", expresó Pinheiro en una rueda de prensa antes de abandonar Yangon.
Pinheiro, un experto independiente que informa directamente al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con base en Ginebra, se ha reunido durante los últimos 5 días con los miembros de la Junta, el equipo de la ONU, monjes budistas, detenidos y representantes de grupos étnicos, en Yangon y la nueva capital del país, Nay Pyi Taw.
