BEIRUT, 3 Jun. (Reuters/EP) -
El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha advertido este martes a los donantes internacionales internacional de la necesidad de preparar un plan para la postguerra en Siria, centrado en la reconstrucción del país y de la región, tras años de cruentos combates.
"La comunidad internacional, incluido el Banco Mundial, Naciones Unidas y los donantes clave, deben idear de forma conjunta un plan que ayude a reconstruir, no solo Siria, sino también Líbano, Jordania, Turquía e Irak, a recuperarse de los masivos efectos colaterales de la guerra", ha dicho Kim.
Aunque ha admitido que la guerra entre el Gobierno de Bashar al Assad y los diversos grupos opositores está lejos de acabar, Jim ha subrayado que acabará en algún momento. "Debemos comprometernos a preparar planes concretos para cuando llegue el día en que las armas callen en Siria", ha considerado.
Kim ha hecho un paralelismo entre los actuales conflictos en Oriente Próximo y el panorama europeo tras la Segunda Guerra Mundial. "Hoy debería ser el 1944 para Siria y para el resto del mundo árabe", ha dicho, en alusión a los pactos económicos de Bretton Woods.
El jefe del BM ha hecho estas declaraciones desde Líbano, que ya alberga a más de un millón de refugiados sirios y que ha perdido miles de millones de dólares en ingresos por el aumento del gasto público como consecuencia de la guerra civil en Siria.
Los tres años de conflicto armado han acabado con el tejido industrial y agrario de Siria, dejando a al menos dos tercios de la población local en extrema pobreza, de acuerdo con un informe difundido la semana pasada por Naciones Unidas.
De acuerdo con la ONU, la guerra civil ha contraído un 40 por ciento del PIB, en comparación con 2011. Casi la mitad de la fuerza de trabajo siria está desempleada y las pérdidas rondan los 143.800 millones de dólares (105.493 millones de euros).
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