WASHINGTON, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el republicano John Boehner, ha instado al presidente del país, Barack Obama, a dar a la sede legislativa "una explicación clara" sobre la posible intervención militar en Siria.
En una carta, Boehner ha solicitado a Obama que comparezca "personalmente" ante el Congreso para explicar "cómo una potencial acción militar en Siria garantizaría los intereses estadounidenses, preservaría la credibilidad estadounidense, disuadiría de un futuro uso de armas químicas y sería parte de nuestra estrategia política".
"Es esencial que dé una explicación clara e inequívoca de cómo las acción militar en Siria --que es un medio, no una política-- asegurará los objetivos estadounidenses y servirá a nuestra estrategia política", ha subrayado.
"También es esencial que informe sobre las bases legales que justifican el uso de la fuerza y cómo encaja eso con la autoridad exclusiva del Congreso (para permitirlo), bajo el artículo uno de la Constitución", ha añadido.
Boehner ha explicado que apoya la política de Obama sobre Siria y, en concreto, que está de acuerdo con la línea roja que estableció sobre el uso de armas químicas, "pero el liderazgo presidencial y una explicación clara son necesarios para ganarse el apoyo del Congreso y de la opinión pública a cualquier acción militar en Siria".
"Después de pasar 12 años luchando contra los que pretenden dañar a nuestros ciudadanos, nuestros intereses y nuestros aliados sabemos perfectamente lo que significa entrar en conflicto. Los militares y sus familias merecen tener la confianza de la opinión pública y del Congreso sobre sus espaldas", ha sostenido.
LAS CONSECUENCIAS
El líder republicano también ha indicado que, "a pesar de que Estados Unidos se enfrenta a una alarmante escalada de sufrimiento humano en Siria, debe contemplar los posibles escenarios que su respuesta podría desencadenar o acelerar".
"Estas consideraciones incluyen la posibilidad de que el régimen de Bashar al Assad pierda el control de sus arsenales de armas químicas y que las organizaciones terroristas --especialmente las vinculadas a Al Qaeda-- mantengan y ganen territorio", ha detallado.
"Soy consciente de que Siria es uno de los pocos ligares donde los intereses de seguridad nacional inmediatos de Estados Unidos convergen visiblemente con sus intereses de seguridad nacional a largo plazo", ha aclarado.
Si bien, ha recordado que "la respuesta de Estados Unidos a las atrocidades cometidas en Siria tienen implicaciones no solo para Siria, sino para la credibilidad estadounidense en todo el mundo, especialmente en lugares como Irán".
"Cómo respondamos tiene también un significativo impacto sobre la seguridad y estabilidad de los aliados de Estados Unidas en la región, que están en apuros por el gran éxodo de refugiados sirios y por la propagación de la creciente violencia que alimenta las tensiones religiosas y étnicas", ha apuntado.
ESCALADA DE TENSIÓN
Los contactos diplomáticos se han intensificado en los últimos días, después de que Estados Unidos y sus aliados reafirmaran que mantienen "todas las opciones" y que sus Fuerzas Armadas están preparadas para llevarlas a cabo.
Fuentes del Gobierno estadounidense han aseverado a la cadena NBC que el ataque contra Siria podría lanzarse "tan pronto como este jueves" y que duraría "tres días". El objetivo principal sería mandar un mensaje al régimen de Al Assad, por lo que tendría un alcance limitado.
En este contexto, el presidente sirio, Bashar al Assad, ha negado otra vez que su Gobierno haya usado armas químicas en la guerra civil, indicando de que tales acusaciones son de "carácter político", y ha alertado a Occidente de que, si invade el país árabe, "le espera el fracaso".
ATAQUE QUÍMICO
Las alarmas saltaron el pasado 21 de agosto, cuando las tropas gubernamentales lanzaron un ataque químico sobre Damasco dejando cientos de muertos y miles de afectado, según han denunciado activistas y opositores.
Este supuesto ataque químico ha activado el engranaje de la política internacional permitiendo que, tras meses de espera, finalmente un grupo de expertos de Naciones Unidas llegara a Siria para investigar estas denuncias sobre el terreno.
El Gobierno sirio ha dado su visto bueno, permitiendo el acceso irrestricto de los expertos de la ONU a todo el territorio, a pesar de que hasta ahora se había negado a que investigaran también las denuncias de la oposición.
