Bono comparte su música de manera espontánea en Zaatari

MADRID, 12 Abr. (EDIZIONES) -

Bono, artista del grupo británico U2, ha interpreado de manera espontánea una de las canciones icónicas del grupo en su visita al campo de refugiados Zaatari, ubicado al norte de Jordania, en un vídeo que ha compartido uno de los miembros de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

"Creo en la llegada de un reino, cuando todos los colores se fundirán en uno, en uno", arranca a cantar delante de unos muy pocos asistentes -tres hombres, una mujer y un niño, según se puede ver en las imágenes-. "Pero aún no he encontrado lo que estoy buscando" es la frase que dan fin a esta pequeña actuación en vivo.

Bono ya visitó a finales del pasado mes Zaatari y compartió una instantánea con los pequeños en la página oficial de Facebook del grupo, con la frase "Hola, estoy aquí para ayudar". Nasser Touaibia es quien ha compartido este "emocionante momento" con el cantante a través de su cuenta de Twitter. "Me siento privilegiado de formar parte de esto", decía Touaibia.

A heartwarming moment as #Bono sings for @Refugees in #Zaatari #camp. I feel so privileged to be part of this pic.twitter.com/bEvb4AENH4

— Nasser Touaibia (@NasserTouaibia) April 12, 2016

UNO DE LOS MAYORES CAMPAMENTO DE REFUGIADOS DEL MUNDO

La mayoría de los que viven en Zaatari provienen de Siria, país en conflicto desde hace más de cinco años entre el Gobierno oficial de Al Assad y quienes quieren que deje el poder, así como por los continuos ataques de grupos yihadistas como el Estado Islámico.

Jordania se ha convertido junto a otros de la región en un territorio al que acuden quienes huyen de Siria dada su cercanía. En concreto, Zaatari es uno de los mayores campos de refugiados del mundo.

En julio de 2012, este campamento dio cobijo a un centenar de familias y nació con el objetivo de ser temporal. Ahora, se ha transformado en la cuarta ciudad de más tamaño de Jordania.

Según cifras de UNICEF, unos 3,7 millones de niños sirios sólo conocen la guerra o ser refugiados y los enfrentamientos se han saldado con la muerte de más de 370.000 personas.