SARAJEVO, 15 Dic. (EP/AP) -
Familias de desaparecidos bosnios de la ciudad de Brcko han pedido que se sometan a exámenes de ADN los 277 cuerpos exhumados recientemente de una fosa común para clarificar su identidad.
Como consecuencia de la guerra que sufrió Bosnia entre 1992 y 1995, más de 500 bosnios musulmanes y católicos croatas de Brcko permanecen desaparecidos desde que fuerzas serbias penetraran en la ciudad y mataran o expulsaran a la población no serbia. Las familias están respaldadas por una asociación que vela por la búsqueda de los desaparecidos. La misma impeló a los familiares a pedir los análisis de ADN ya que es lo que llevan "buscando desde hace 15 años, para encontrar así y enterrar con honor" a sus "seres queridos".
El pasado miércoles expertos forenses finalizaron las exhumaciones que les han llevado un mes de de duración y que han dado con 277 cuerpos resultado de la guerra. El jefe del equipo forense, Murat Hurtic, declaró que los cuerpos habían sido descubiertos en una fosa común secundaria. Los asesinos, con la intención de ocultar la masacre, traspasaron los cadáveres de la fosa común original a una segunda mediante excavadoras. De ahí que 162 de los 277 cuerpos estén desmembrados. Los restos serán identificados con análisis de ADN y llevados a las familias "tan pronto como contengan los propósitos buscados", según recogió un comunicado de la asociación.
