SAO PAULO, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El gobierno brasileño está estudiando la posibilidad de construir un tren de alta velocidad con el que uniría las ciudades de Río de Janeiro y Sao Paulo separadas por una distancia de 405 kilómetros. El presupuesto inicial de la obra de infraestructura sería de 9.000 millones de dólares (6.623 millones de euros) y con ello Brasil iniciaría la renovación de su obsoleto sistema ferroviario.
Según indicó el juez Augusto Nardes en un comunicado oficial, el Tribunal de Cuentas de la Unión aprobó ayer los estudios de viabilidad para el citado proyecto.
En la actualidad, el sistema ferroviario brasileño es disperso y se dedica casi en exclusiva al transporte de carga. Los pasajeros suelen optar por el transporte aéreo, que no está al alcance de todos los bolsillos o bien por el terrestre, una red de carreteras muy estropeada.
El tribunal afirmó que las compañías interesadas en competir en la licitación pública tendrán que obtener, en primer lugar, una licencia ambiental preliminar antes de postularse a la ejecución del proyecto.
La línea férrea de alta velocidad entre Río de Janeiro y Sao Paulo tendría una distancia de 405 kilómetros y la mayor parte de su recorrido sería subterráneo, según el citado comunicado.
De acuerdo al diario brasileño 'O Globo' tres empresas de Corea del Sur y una italiana ya manifestaron su interés en la realización del proyecto. El rotativo afirmó que la presentación de los planes iniciales podría comenzar en 90 días.
El fabricante francés de trenes Alstom expresó también su interés, a principios de abril, en la infraestructura cuyo periodo de realización será de un número aún indeterminado de años, según la agencia de noticias 'Agencia Estado'.
El coste del billete por trayecto sería de unos 61 dólares (45 euros) y el tiempo del viaje no superaría la hora y media (90 minutos). Entre Sao Paulo y Río de Janeiro suman 30 millones de habitantes.
De aprobarse el proyecto de construcción de esa línea la intención del Gobierno brasileño es ampliar la red ferroviaria de alta velocidad desde Río de Janeiro a Belo Horizonte, en el Estado de Minas Gerais y desde Sao Paulo a la ciudad sureña de Curitiba, según el diario 'O Globo'.
