NUEVA YORK, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente estadounidense George Bush, reiteró hoy que a Estados Unidos no le temblará el pulso para solicitar que Teherán suspenda todas las actividades de enriquecimiento de uranio antes de que su Administración se una a las negociaciones internacionales para resolver la crisis nuclear.
"Las armas nucleares en manos de este régimen serían una grave amenaza para los pueblos de todo el mundo", dijo Bush a dos días de su viaje a Europa para asistir a la Cumbre Unión Europea-Estados Unidos, que se celebrará en Viena el próximo miércoles.
Bush aseguró que Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, China, y Rusia han adoptado una postura unificada para resolver la crisis que ha suscitado la iniciativa nuclear iraní mediante la diplomacia y, por tanto, Teherán debe "suspender por completo y de forma verificable el enriquecimiento de uranio y las actividades de reprocesamiento".
"Los líderes iraníes tienen una clara oportunidad: esperamos que acepten nuestra oferta y suspendan voluntariamente estas actividades para que podamos trabajar en un acuerdo que produzca a Irán verdaderos beneficios", dijo el presidente.
"Si Irán rechaza nuestra oferta, desembocará en la entrada en escena del Consejo de Seguridad, y un mayor aislamiento del mundo y sanciones económicas y políticas más fuertes", afirmó el mandatario norteamericano.
Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad más Alemania, ofrecieron a Irán un paquete de incentivos destinados a que Teherán renuncie al enriquecimiento, actividad que Irán considera un derecho inalienable, por lo que sus líderes ya han anunciado que propondrán enmiendas al paquete.
"Tengo un mensaje para el régimen iraní", afirmó Bush. "América y sus compañeros están unidos. Hemos presentado una oferta razonable y los líderes iraníes deben verla como lo que es: una oportunidad histórica de llevar al país a un mejor rumbo", reiteró el presidente, añadiendo que si los líderes iraníes "quieren paz y prosperidad y un mejor futuro deben aceptar la oferta, abandonar cualquier ambición destinada a la obtención de armas nucleares y cumplir con sus obligaciones internacionales", zanjó.