Camboya.- Los jueces y fiscales del tribunal que juzgará a los antiguos Jemeres Rojos prestan juramento de su cargo

PHNOM PENH 3 Jul. (EP/AP) -

Los jueces y los fiscales tanto camboyanos como extranjeros encargados de juzgar a los antiguos líderes de los Jemeres Rojos por genocidio y crímenes contra la Humanidad prestaron hoy juramento de su cargo en el tribunal encargado del proceso, respaldado por la ONU.

La toma de juramento era uno de los pasos clave en el proceso para hacer justicia a las víctimas del régimen Jemer Rojo, cuyas políticas a finales de los 70 se estima que se cobraron 1,7 millones de vidas. Tras décadas de falta de acción y retrasos, los juicios se espera que comiencen en 2007, si bien por el momento no se ha fijado ninguna fecha.

"Este es el hito que marca oficialmente el comienzo de un largo proceso", destacó Youk Chhang, director del Centro de Documentación de Camboya, un grupo independiente que recoge pruebas de los crímenes de los Jemeres Rojos. La ceremonia de juramento de los 17 responsables judiciales camboyanos y los 10 designados por la ONU se celebro en el Palacio Real en Phnom Penh.

Este acontecimiento "acaba con las especulaciones negativas que hubo en el pasado sobre que no habría un juicio" contra los dirigentes Jemeres Rojos todavía vivos, señaló el portavoz de la oficina administrativa del tribunal, Reach Sambath.

Uno de esos dirigentes, el principal ideólogo Nuon Chea, dijo que acudirá ante el tribunal si fuera convocado para aclarar el pasado. "Estaré contento de acudir para que la gente de mi país y de otros países sepa la verdad de lo que ocurrió. Pregunten lo que pregunten, les contestaré", señaló en una entrevista a Associated Press desde Pailin (noroeste), donde vive junto con otros ex dirigentes Jemeres Rojos.

"Soy responsable por lo que ocurrió, no por los asesinatos sino por no ser capaz de proteger a mi propio pueblo", afirmó. Las víctimas del régimen Jemer Rojo (1975-79) murieron de hambre, enfermedades, exceso de trabajo o ejecutadas. Desde que el régimen cayó, ninguno de sus dirigentes ha sido acusado por las atrocidades cometidas y su líder, Pol Pot, falleció en 1998.

Los juristas camboyanos prometieron hacer su trabajo con "honor, conciencia profesional, integridad, transparencia e independencia", y no "aceptar o buscar instrucciones de ningún gobierno o otras fuentes". Las oficinas del tribunal ya habían sido inauguradas este año después de que Camboya y la ONU acordaran en 2003 el establecimiento de forma conjunta del tribunal.