Camboya.- Manifestación pro Derechos Humanos en Camboya para recordar los disturbios de hace un año

PHNOM PENH, 10 Dic. (EP/AP) -

Miles de camboyanos y diplomáticos extranjeros participaron hoy en la manifestación para conmemorar el Día de los Derechos Humanos en el aniversario de las protestas durante las que fueron encarcelados varios activistas.

El embajador estadounidense, Joseph Mussomeli, participó junto a activistas de Derechos Humanos en los actos celebrados en el Estadio Nacional de Phnom Penh. Algunos de los manifestantes fueron encarcelados durante las protestas del año pasado.

"Durante este año 71 activistas comunitarios o sindicales han sido detenidos ilegalmente o bajo cargos falsos. Las asambleas pacíficas y las manifestaciones también han sido sistemáticamente prohibidas", denunció Mussomeli ante los manifestantes.

"El Gobierno no necesita aplicar una férrea presión contra los manifestantes, contra los críticos, contra la oportunidad de los ciudadanos de luchar contra la injusticia y la corrupción", añadió.

Los grupos organizadores calculan que participaron en la movilización unas 10.000 personas.

Una manifestación similar celebrada el año pasado terminó con varios activistas de los Derechos Humanos detenidos debido a la exhibición de una pancarta en la que se criticaba al primer ministro, Hun Sen, por haber firmado un controvertido acuerdo fronterizo con Vietnam.

Entre los detenidos estaba Kem Soja, director del Centro Camboyano para los Derechos Humanos, una organización fundada en Estados Unidos. Otros dos activistas pro Derechos Humanos, un sindicalista y un periodista también fueron detenidos bajo la acusación de difamar contra Hun Sen.

Esta medida activó todas las alarmas ante el creciente autoritarismo camboyano y fue condenada por la comunidad internacional.

"Nuestra lucha no es inútil", subrayó Kem Soja, y añadió que la postura del Gobierno hacia los críticos parece haberse suavizado en el último año. "Tras los disturbios provocados por el Gobierno contra los activistas de Derechos Humanos, el mismo ejecutivo ha comenzado a abrir la puerta, aunque sea un poco" a los trabajadores de los Derechos Humanos.

La presión internacional consiguió que los activistas fueran liberados, pero los cargos que pesan sobre ellos nunca fueron retirados.