BEIJING, 30 Oct. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
El Gobierno de China expresó hoy públicamente su rechazo al encuentro que han mantenido el primer ministro canadiense, Stephen Harper, y el Dalai Lama, que calificó de "flagrante interferencia" en los asuntos internos de China.
Harper recibió ayer al Dalai Lama, con el que se entrevistó durante 40 minutos a puerta cerrada. La reunión, la primera que se celebra entre un primer ministro canadiense y el líder espiritual tibetano, se produce después de la concesión de la medalla oro del Congreso estadounidense al Dalai Lama hace un par de semanas y de su encuentro en septiembre con la canciller alemana, Ángela Merkel. El Dalai Lama cuenta desde el año pasado con ciudadanía canadiense honoraria.
"Declaramos nuestro enorme descontento. Esperamos que reflexionen y corrijan sus desacertadas acciones", declaró hoy en rueda de prensa regular Liu Jianchao, uno de los portavoces del Ministerio chino de Asuntos Exteriores.
El Dalai Lama, exiliado desde 1959 después de que las fuerzas armadas chinas, presentes en Tíbet desde 1951, reprimiesen un levantamiento popular, está considerado por Beijing una amenaza para la estabilidad nacional, visión que contrasta con la imagen de autoridad moral que le hizo merecedor del premio Nobel de la Paz en 1989.
