BEIJING 25 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Ministerio de Exteriores de China ha afirmado que su Gobierno está profundamente ofendido y se opone con firmeza al informe anual de Estados Unidos sobre su poder militar, señaló hoy Liu Jianchao, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias china Xinhua.
El Informe sobre Poder Militar de China 2006, emitido ayer por el Departamento de Defensa de EEUU, continúa divulgando el concepto de la "amenaza China" y viola gravemente los principios que rigen las relaciones internacionales, dijo Liu en una conferencia de prensa.
Señaló que el informe, que mostraba según sus palabras una mentalidad de "Guerra Fría", exagera el poder militar de China y de su gasto militar con motivos ocultos e interfiere abiertamente en losasuntos internos de China.
"China es una nación que ama la paz y ha insistido en un camino de desarrollo pacífico, con una política de defensa nacional de naturaleza defensiva. La comunidad internacional ha reconocido en general que China es una importante fuerza de promoción de la paz en la región de Asia y el Pacífico y en el mundo en su totalidad", dijo Liu.
Indicó que es natural que China, un estado soberano, desarrolle su construcción de defensa nacional destinada a defender la seguridad nacional y a proteger su integridad territorial.
"Taiwan es una parte inseparable de los territorios de China. El gobierno chino se adhiere a la política de 'reunificación pacífica y un país, dos sistemas'", afirmó Liu.
Mencionó que el Gobierno chino ejercerá unu mayor esfuerzo y mostrará toda la sinceridad en el seguimiento de las perspectivas de reunificación pacífica de la patria. Sin embargo, dijo Liu, China nunca tolerará la "independencia de Taiwan" y nunca permitirá que nadie separe a Taiwan de China de ninguna forma.
Liu comentó que China ha exhortado a EEUU a adherirse a los compromisos de la política de "una sola China", acatando los tres comunicados entre China y EEUU y oponiéndose a la "independencia de Taiwan", suspender la venta de armas a Taiwan y no enviar ninguna señal equivocada a las fuerzas separatistas de la "independencia de Taiwan".