PARÍS, 18 Sep. (EUROPA PRESS/Javier Gómez Muñoz) -
El presidente francés, Jacques Chirac, pidió hoy "evitar las amalgamas entre el Islam y el islamismo", en unas declaraciones en las que, indirectamente, mostró su desacuerdo con las palabras pronunciadas por el Papa Benedicto XVI.
"El diálogo entre culturas que Francia defiende supone evitar todo aquello que suponga una tensión entre los pueblos o las religiones", precisó el dirigente galo, en la primera entrevista radiofónica que concede en sus 12 años de presidencia.
Chirac apuntó, en declaraciones a Europe-1, que es necesario separar "el Islam, una gran religión respetable", del "islamismo", que es una "tendencia política" dentro del Islam.
El jefe de Estado explicó que "es posible volver a la paz" entre las diferentes religiones del mundo, pero que la condición indispensable es no salirse del marco del "diálogo de civilizaciones".
LÍBANO
Chirac también se refirió a la situación de líbano y anunció que Francia propondrá una "conferencia internacional" para acordar las ayudas necesarias para la reconstrucción del país árabe, tras los daños sufridos durante los enfrentamientos entre la milicia Hezbolá e Israel.
"Más allá de la solución política, la reconstrucción de Líbano exige una comunidad internacional unida", defendió el mandatario francés.
El primer objetivo de la comunidad internacional y de esta reunión debería ser, según Chirac "reforzar la autoridad del gobierno libanés". "Ningún país puede vivir si una parte de su territorio escapa a su égida", argumentó el presidente.
Chirac consideró "normal" que haya una "corriente que exprese políticamente" los postulados que defiende Hezbolá, pero consideró "contestable expresarlo por la fuerza y mediante milicias armadas". "No hay país que pueda aceptar que una parte de su territorio esté controlada por milicias armadas", añadió.
El presidente afirmó que "la situación política es frágil en Líbano" y que el "alto el fuego" que puso fin a los enfrentamientos "era necesario". Asimismo, se mostró optimista en cuanto a que Israel y Hezbolá cumplan sus compromisos "porque se cumplen las condiciones" que plantearon para el alto el fuego.
En relación a las dudas que planteó Francia antes de tomar el mando de la Fuerza Internacional de Naciones Unidas en Líbano (FINUL), Chirac explicó que se trataba de "estar seguros de que los soldados podrían ejercer su misión, protegerse y actuar con eficacia".
