Chirac pide al Gobierno dialogar con los sindicatos la ley que regula los contratos para jóvenes


PARIS, 15 Mar. (EUROPA PRESS/Javier Gómez Muñoz) -

El presidente francés, Jacques Chirac, recomendó hoy al Gobierno que abra un diálogo con los sindicatos, "con espíritu constructivo y de responsabilidad", para poner fin a la crisis provocada por los nuevos contratos flexibles para jóvenes, que incluyen un periodo de prueba de dos años en los que rige el despido libre.

En una intervención en el consejo de ministros que fue explicada a la prensa por el portavoz del Ejecutivo, Jean François Copé, el jefe del Estado se limitó a pedir la negociación de una ley que ya ha sido aprobada al Gobierno de Dominique de Villepin. Pero no apoyó la retirada de los Contratos Primer Empleo (CPE), como exigen las organizaciones estudiantiles, los sindicatos y la oposición de izquierdas.

El Gobierno ha llamado en vano a los sindicatos a la mesa de negociación en los últimos días, pero sólo para retocar la reforma y una vez que ésta fue aprobada por decreto en el Parlamento. Ni los sindicatos ni la patronal fueron consultados en su elaboración. Las organizaciones sociales han hecho de esta "inflexibilidad" su principal crítica al primer ministro conservador y por eso se niegan a aceptar la negociación a posteriori.

Los opositores al plan de empleo juvenil habían exigido durante las últimas jornadas a Chirac que se negase a promulgar una ley que la mayoría de los franceses rechaza, según los sondeos, y que ha provocado continuas manifestaciones en las últimas semanas.

Las declaraciones de Chirac pueden entenderse como una petición de flexibilidad al Gobierno, pero no una desautorización, pues el presidente calificó hoy los controvertidos contratos CPE como "necesarios" y ayer anunció su "respaldo total y sin reservas" a la acción en este terreno del Ejecutivo. El presidente sólo reconoció que hay "interrogaciones e inquietud" entre la población.

De hecho, el ministro delegado de las pequeñas y medianas empresas, Renaud Dutreil, afirmó hoy que Chirac aplaudió durante el Consejo de Ministros "la voluntad de diálogo y concertación" de Villepin "para mejorar en lo que se pueda" el texto legal.

Bernard Thibault, secretario de la CGT, primer sindicato del país, confirmó hoy que "no hay otra vía posible que la retirada de los CPE". "Se necesite el tiempo que se necesite, lo conseguiremos", previno Thibault, quien apoyó las próximas movilizaciones y recordó el total consenso sindical en negarse a negociar una vez que la ley ha sido votada en el Parlamento. Fuerza Obrera (FO), por su parte, censuró la "ultrarrigidez" del Ejecutivo por su negativa a retirar una medida que define como "un desprecio para los jóvenes y los trabajadores".

Mientras tanto, siguen las protestas en los centros universitarios. Más de dos tercios (59) de las 84 universidades públicas francesas fueron escenario ayer de movilizaciones en la "jornada de acción" convocada por la Coordinación Nacional Estudiantil, que reúne a las diferentes organizaciones universitarias contrarias a la reforma. Cuarenta y siete de estos centros, según la UNEF, principal organización estudiantil, estaban parcial o totalmente bloqueados por las protestas.

Mañana, todas las organizaciones estudiantiles de secundaria y universitarias y los sindicatos convocarán nuevas movilizaciones y protestas, incluido un paro de 24 horas sólo convocado por el sindicato Fuerza Obrera (FO), tercero del país. Finalmente, el sábado habrá manifestaciones en toda Francia, convocadas por el conjunto de organizaciones sindicales y estudiantiles. La semana pasada, en una movilización similar, los contrarios a los CPE lograron congregar a entre 400.000 y un millón de personas.