TEHERAN, 21 Dic. (EUROPA PRESS)
La estrella del influyente político Hashemi Rafsanyani, un clérigo que ha sabido colocarse a ambos lados de la división entre reformistas y conservadores, está en ascenso como rival del presidente de Irán, desde que elecciones locales revelaron una profunda disconformidad con la intransigencia del gobierno.
Las elecciones de la semana pasada a concejos municipales en todo el país aparecían como un referendo sobre los 18 meses del presidente Mahmoud Ahmadineyad, y los resultados hasta el momento le daban amplias victorias a sus rivales.
Desde que asumió, Ahmadineyad ha escalado el enfrentamiento con Estados Unidos y el occidente en general, lo que le ha valido la amenaza de sanciones de la ONU por el programa de enriquecimiento de uranio. También han provocado indignación generalizada sus declaraciones contra Israel y que ponen en duda el holocausto nazi.
El miércoles, un diario influyente que suele reflejar el pensamiento de muchos miembros de la jerarquía clerical conservadora dijo en un editorial que era hora de que Ahmadinejad dejara de hacer declaraciones explosivas y se abocara a la economía.
"La elección podría ser muy aleccionadora para quienes han estado en el poder", dijo el editorial del 'Jonhuri Eslami'. "La soberbia, el desconocimiento de la situación económica del pueblo, los insultos a personas respetadas y las políticas de alto vuelo fueron algunos de los elementos que provocaron el fracaso de aquellos que no podían imaginar semejante desenlace".
Ahmadineyad, quien no ha hecho declaraciones sobre las elecciones del viernes, sintió la presión el martes durante un discurso en la ciudad occidental de Kermanshah. Mientras él hablaba, muchos asistentes coreaban, "el desempleo es un gran problema", informó el diario progubernamental 'Keyhan'.
Rafsanyani, un conservador moderado, ganó más votos que cualquier otro candidato en Teherán para la Asamblea de Expertos, un organismo de 86 clérigos que supervisa al líder supremo del país y elige a su sucesor.