NAYAF (IRAK), 5 Sep. (Reuters/EP) -
El clérigo chíi antiestadounidense Moqtada al Sadr ha advertido al Gobierno de Irak de que organizará nuevas protestas si no crea 50.000 puestos de trabajo, garantiza una cuota específica a los iraquíes de la riqueza petrolera de la nación, proporciona combustible para los generadores de energía y acelera las reformas.
Al Sadr, que pertenece a un movimiento político que forma parte del Gobierno de coalición liderado por el primer ministro Nuri al Maliki, ha declarado que está dando al Gobierno una "última oportunidad" después de que en agosto se cumplieran los seis meses que le había dado a Al Maliki para acelerar las reformas que pedían los manifestantes que salieron a las calles exigiendo la creación de empleo, más electricidad y la mejora de los servicios públicos.
Los iraquíes se unieron a la primavera árabe manifestándose en las calles para pedir estas reformas y que se pusiera fin a las corrupción pública. Actualmente, los iraquíes tienen unas pocas horas diarias de electricidad de la red nacional y dependen de los generadores privados.
"Esta es la última oportunidad antes de fijar una fecha para las manifestaciones públicas", ha dicho el clérigo en un comunicado. "Es un derecho del pueblo iraquí reivindicar sus derechos y servicios", ha añadido, aunque no ha fijado un nuevo plazo para que el Gobierno cumpla sus condiciones. Sin embargo, al Sadr ha afirmado que, "si estas demandas se cumplen, las manifestaciones se retrasarán hasta nuevo aviso".
El Gobierno debe decidir si las tropas de Estados Unidos permanecerán en el país después de fin de año y controlar la violencia de los islamistas suníes y las milicias chiíes. Por el momento, las protestas han llevado al Gobierno de Al Maliki a impulsar el programa de racionamiento de alimentos y a prometer energía libre, pero los iraquíes consideran que la mejoría real ha sido mínima.
