C.Marfil.- El obispo de Abiyán denuncia que Occidente contribuye a la guerra en África con la venta de armas

BARCELONA 13 May. (EUROPA PRESS) -

El obispo auxiliar de Abiyán, Costa de Marfil, Joseph Aké, denunció hoy que Occidente contribuye a las guerras africanas porque no pone fin al tráfico de armas sino que lo fomenta con su industria armamentística, según afirmó en una entrevista concedida a Europa Press con ocasión de su participación en el XXII Congreso Mundial de la Federación Mundial de Médicos Católicos (FIAMC) que tiene lugar hasta mañana en Barcelona.

Aké, cuyo país lleva cuatro años en guerra civil, aseguró que las armas "con las que se mata la gente de mi pueblo" se fabrican en Europa y en Estados Unidos, ya que en Costa de Marfil no tiene la infraestructura industrial adecuada para fabricarlas por sí misma.

El obispo de Costa de Marfil explicó que, después de años intensos de luchas y asesinatos, ahora, la prioridad es conseguir la paz, para después resolver los graves problemas de desnutrición y de carencia de agua que hay en el país, el cual, por otra parte, es tan rico en materia prima.

Aké aprovechó su visita a Barcelona para pedir ayuda para a los hospitales de su país, en los que faltan medicinas y recursos de todo tipo, y otros proyectos como una escuelas de formación para enfermeras, entre otros.

UN 15% DE POBLACIÓN CON SIDA.

En cuanto al problema del SIDA, enfermedad que sufre un 15% de la población de Costa de Marfil, aseguró que el único método eficaz para evitar el contagio es la abstinencia. Señaló que son muchos los jóvenes que entienden que el preservativo no es el método más adecuado y que, por el contrario, la abstinencia, en caso de que haya infección, es "el modo más eficaz para evitar el contagio".

Aké también se mostró a favor de la emigración a Occidente y consideró que sirve para "crear lazos de unión y solidaridad entre los países, independientemente de que sean ricos o pobres, blancos, negros o asiáticos" y añadió que "nadie es propietario de nadie, porque es Dios quien nos ha puesto en la Tierra y no es necesario crear más barreras de las que ya hay entre unos y otros".

Además, indicó que, precisamente, Costa de Marfil ha dado ejemplo en cuanto a la mezcla de pueblos, ya que el 30% de sus habitantes son extranjeros. No obstante, matizó que los movimientos migratorios deben llevarse a cabo de un modo "organizado".

Aké quiso mostrar su agradecimiento a España, y en particular a la ONG Manos Unidas, "porque ha ayudado mucho a mi país en estos momentos tan duros" de guerra y añadió que, según reza un proverbio de Costa de Marfil, "el sufrimiento es el que mide la amistad", por lo que "España es amiga".

Costa de Marfil, ex colonia francesa, tiene más de 18 millones de habitantes y limita al norte con Malí y Burkina Fasso, al oeste con Liberia y Guinea Conakry, al este con Ghana y al sur con el Océano Atlántico.

Actualmente está dividida en dos partes separadas por los cascos azules de la ONU, las fuerzas de paz africanas y el ejército francés. La zona norte está ocupada por los rebeldes, mientras que el Gobierno controla la zona sur.