ABIDJAN, 24 Ene. (EP/AP) -
El presidente Laurent Gbagbo afirmó ayer lunes que reuniría al Gobierno de transición dividido por la guerra civil, pero aseguró que las protestas contra Naciones Unidas llevadas a cabo la pasada semana sólo era una batalla más en una larga lucha para reunificar el país.
El Frente Popular Marfileño, liderado por Gbabo, boicoteó el gobierno de transición tras dos días de violentas protestas tras una recomendación de un grupo de mediadores respaldado por la uno en la que se sugería que el parlamento no renovara su expirado período de mandato. La institución, ocupada por magistrados del partido de Gbabo, se contemplaba como su última base de poder, y sus competencias se vieron seriamente afectadas durante el nuevo Gobierno de transición
El FPM anunció el lunes que devolvería a sus ministros al Gabinete, pero que continuaría la lucha hacia la reunificación nacional tras la guerra civil de 2002 que dejó a la nación dividida, con rebeldes armados y en posesión de los territorios del norte, con tratados de paz ignorados por ambas partes.
"Esta victoria no ha sido sino un paso en un largo camino de batallas", afirmó Affi N'Guessan, presidente del FPM. "Estamos esperando el desarme, la reunificación nacional y unas elecciones libres y transparentes".