BEIRUT, 12 Abr. (Reuters/EP) -
El Consejo Nacional Sirio (CNS), el principal órgano de los opositores en el extranjero, ha advertido de que será mañana cuando realmente se ponga a prueba el "compromiso" del Gobierno del presidente Bashar al Assad con el alto el fuego que supuestamente comenzó esta mañana en Siria.
El principal responsable del CNS, Burhan Ghalioun, ha advertido de que "el pueblo sirio saldrá mañana a las calles", como cada viernes tras los rezos. "Veremos si el Gobierno mantiene su compromiso", ha apuntado, en declaraciones telefónicas a Reuters.
Ghalioun ha llamado a la población a ser "cauta", porque "el régimen no respetará el alto el fuego y disparará". Basa su desconfianza en que el acuerdo para el fin de la violencia es "frágil", como lo demuestra el hecho de que "todavía haya armas que no han sido retiradas" de las poblaciones.
En este sentido, el jefe del CNS ha declarado que el Ministerio de Defensa sirio sigue "con el dedo en el gatillo". No en vano, el propio régimen advirtió ayer de que se reserva el derecho a responder ante cualquier posible agresión de los rebeldes, a los que califica de "grupos terroristas armados".
"Creo que la comunidad internacional y Kofi Annan deberían actuar con cautela, y también el pueblo sirio debería ser cuidadoso", ha añadido Ghalioun en referencia al enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, que fue quien propuso el plan de paz en el que se enmarca el alto el fuego.
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