PARÍS, 27 Ene. (Reuters/EP) -
El Consejo Nacional Sirio (CNS), una alianza opositora, está dispuesto a dar dinero y equipamiento a los rebeldes que están luchando en Siria contra el régimen del presidente Bashar al Assad mientras trabajan para crear una estructura de mando organizada, según ha afirmado este viernes una miembro del grupo.
Después de mantener una relación distante durante meses, el CNS y el Ejército Libre Sirio (ELS) alcanzaron un acuerdo este mes de enero para reorganizar las unidades que combaten bajo el paraguas del ELS.
Bassma Kodmani ha asegurado que, gracias al aumento en el número de soldados que desiertan del Ejército, la revuelta que comenzó con manifestaciones pacíficas hace diez meses ha adoptado un carácer militar irreversible y ahora el CNS debe ayudar a los insurgentes.
"Ahora el CNS está tratando de saber qué grupos hay en Siria y en Turquía", ha explicado. "Tenemos expertos militares, antiguos soldados sirios, que están determinando dónde se encuentran y vinculándolos en una especie de cadena de mando", ha añadido.
Kodmani ha aclarado que el CNS no proporcionará armas porque se opone a los ataques contra personas concretas o edificios, pero sí facilitará fondos directamente o buscará fuentes de financiación para mantener a flote el ELS.
Esta miembro del Consejo Nacional Sirio ha hecho estas declaraciones ante un grupo de periodistas en París, donde trabaja como conferenciante y dirige el grupo de expertos Iniciativa para la Reforma Árabe. El CNS no tiene una única sede, pero normalmente ha celebrado sus reuniones en París y Estambul.
ENTRE 20.000 Y 30.000 REBELDES EN SIRIA
Kodmani ha precisado que en Siria hay entre 20.000 y 30.000 rebeldes a los que se suman otros 300 en Turquía. "Necesitan equipos de comunicaciones, chalecos antibalas y equipamiento no ofensivo para garantizar su integración. Si sienten que están aislados, se transformarán en milicias", ha señalado.
En su opinión, uno de los principales problemas para convertir el ELS en una fuerza coherente son las tensiones entre los militares que desertaron poco después de que comenzara la revuelta, como el coronel Riad al Asaad, y otros como el general Mostafa al Sheij, que desertó este mes de enero. Kodmani ha indicado que otro general de alto rango huyó a Turquía recientemente pero no ha revelado su identidad.
"Es necesario asegurarse de que las acciones del ELS se pueden organizar un objetivo estratégico", ha subrayado Kodmani, una de los miembros del CNS que se presenta como candidata a dirigir la formación. La elección se hará el mes que viene.
NO TIENEN UN TERRITORIO
A su entender, "el principal punto débil" del Ejército Libre Sirio "es que no tiene un territorio". "No hay una Benghazi, pero hay algunas bolsas", ha dicho en referencia a la ciudad de Libia que se convirtió en el bastión principal de las fuerzas rebeldes que derrocaron al coronel Muamar Gadafi.
Esta semana, los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales e insurgentes se han acercado a Damasco. Este jueves combatieron en Duma, a las afueras de la capital, y este viernes ha resurgido la violencia en Homs, en el oeste del país, a raíz de una matanza en una familia suní.
Kodmani ha destacado que el Gobierno está perdiendo el control de algunas regiones y que tratará de recuperarlo en ciudades como Hama y Homs, los dos pilares de la revuelta contra Al Assad.
CONSEJO DE SEGURIDAD
El Consejo de Seguridad de la ONU se va a reunir este viernes para decidir qué hacer con el caso de Siria. Se repartirá un borrador de resolución redactado por países occidentales y árabes sobre el que se realizará una votación la próxima semana, previsiblemente.
El borrador, obtenido por la agencia Reuters, pide que se inicie una "transición política" en Siria, pero no prevé sanciones contra Damasco.
"Necesitamos una resolución seria en el Consejo de Seguridad que diga que el Consejo culpa al régimen" por la violencia y además "establezca un periodo de tiempo después del cual tomará otras medidas", ha afirmado Kodmani.
La líder opositora ha dicho que el CNS ha pedido al secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, que le permita representar a los ciudadanos sirios en las conversaciones. "Creo que la Liga Árabe tiene la influencia suficiente para convencer a los rusos para que cambien su postura", ha indicado.
