SEÚL, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El jefe de la Policía Nacional de Corea del Sur, Cho Hyun Oh, ha presentado su dimisión este lunes, en medio de las críticas que ha recibido el Cuerpo, que tardó trece horas en reaccionar a una llamada telefónica de auxilio de una mujer que había sido secuestrada. La mujer explicó claramente el lugar donde se encontraba y que había sido violada, pero la Policía no reaccionó.
Cho ha pedido disculpas durante una rueda de prensa en Seúl y ha dicho que asume la responsabilidad por lo ocurrido. "Rezo por el alma de la víctima, doy mi pésame a su familia y pido perdón", ha declarado, según la agencia de noticias Yonhap.
"Me siento profundamente culpable y expreso mis sinceras disculpas por la negligencia de la Policía y los horribles resultados que tuvo, así como por haber decepcionado a la gente por el intento de la Policía de ocultar (el caso) y por sus mentiras", ha añadido.
El cuerpo mutilado de la víctima, una mujer de 28 años cuyo nombre no ha sido revelado, fue encontrado en el domicilio del presunto asesino, situado en Suwon, al sur de Seúl, hace una semana, unas trece horas después de que hubiese llamado a la Policía para pedir ayuda. En la grabación de la llamada se escucha cómo la víctima explica que ha sido secuestrada y violada y da una descripción detallada del lugar donde se encuentra.
En un principio, la Policía afirmó que la llamada solo había durado quince segundos, que la víctima no facilitó la ubicación exacta y que 35 agentes se habían desplazado al lugar. Sin embargo, luego se supo que la llamada había durado siete minutos y 36 segundos, que la mujer dijo claramente dónde se encontraba y que solo se enviaron seis policías.
La Policía ha detenido a un sospechoso, un hombre chino-coreano de 42 años de edad y apellidado Woo.
Un asesor del presidente surcoreano, Lee Myung Bak, ha adelantado que éste va a aceptar la dimisión de Cho. "Sin embargo, el momento de su salida se decidirá después" de las elecciones generales de este miércoles, ha agregado la fuente, según Yonhap.
El jefe de la Policía ha indicado que no ha hablado de su dimisión con la Presidencia y que ha tomado la decisión él solo porque "el fallo es demasiado grande como para que se pueda disculpar".
Cho, que se ha reunido con la familia de la víctima, ha asegurado que los policías que cometieron la negligencia responderán por ello, que se responderá con más dureza en los casos en los que se oculte información o se mienta y que se introducirán mejoras en las operaciones de respuesta a las llamadas de emergencia.
