SEUL 31 May. (EP/AP) -
La transición de Corea del Sur, que ha pasado de ser uno de los países más pobres del mundo hace medio siglo al poderío industrial de hoy, es un modelo para el Tercer Mundo, especialmente para Africa, valoró hoy el presidente del Banco Mundial Paul Wolfowitz.
"Corea del Sur es un país con una historia notable sobre el exitoso desarrollo", indicó Wolfowitz durante un discurso patrocinado por la estatal Agencia para la Promoción del Comercio-Inversión en Corea del Sur. "Hace sólo 50 años, Corea era un país pobre y pequeño con una economía cerrada", recordó.
Wolfowitz se entrevistó ayer con el presidente surcoreano, Roh Moo-hyun y otros altos funcionarios para analizar el cometido del país como donante de la ayuda internacional y analizar la manera de combatir conjuntamente la pobreza global.
Wolfowitz mencionó en su discurso la acertada política gubernamental, incluyendo las inversiones en infraestructuras industriales y sociales, especialmente la enseñanza, y la ayuda internacional, factores que consideró de importancia clave en el éxito de Corea del Sur para llegar a ser la décima economía más fuerte del mundo.
"Corea es el tipo de modelo que desea mencionar el Banco Mundial cuando trabaja con otros países", agregó. Wolfowitz alabó a Corea del Sur porque estudia duplicar los fondos que destina a la ayuda exterior al 0,1% de su Producto Interior Bruto (PIB) para 2009 y triplicar la ayuda que otorga a Africa a 100 millones de dólares para 2008.
"El liderazgo coreano conlleva ciertas responsabilidades. Hoy, muchos países, especialmente en el Africa subsahariana, se encuentran en la misma situación que atravesaba Corea del Sur hace 40 años. Estos países podrían aprender mucho de la experiencia de Corea", agregó.
Roh anunció la expansión de un plan de ayudas para Africa durante la visita que realizó el pasado marzo a varios países del continente, incluyendo Nigeria. La visita a Corea del Sur fue la primera de un presidente del Banco Mundial desde 1998. Wolfowitz partió esta noche con destino a Europa, anotó el funcionario del Banco Mundial Lester Dally.