Crónica Afganistán.- Mueren 14 soldados británicos tras estrellarse un avión de la OTAN cerca de Kandahar

Actualizado: sábado, 2 septiembre 2006 21:08

Al menos 10 talibán y siete policías murieron en las últimas horas en diversos enfrentamientos en el país

KABUL, 2 Sep. (EP/AP) -

Un total de 14 soldados británicos murieron hoy tras estrellarse un avión de la OTAN en el sur de Afganistán, según informó el Ministerio británico de Defensa. Pese a que un supuesto portavoz de los talibán reivindicó la caída del aparato, el ministro británico de Defensa, Desmond Browne, aseguró que "todos los indicios" señalan que el avión sufrió "un terrible accidente y no una acción hostil". El incidente del avión de la OTAN se produce en un contexto particularmente violento, ya que en las últimas horas han muerto al menos 10 talibán y siete policías en diversos enfrentamientos en varios puntos de Afganistán.

"Sé que el pueblo de Reino Unido se unirá a mí para expresar nuestras profundas condolencias a los seres queridos de quienes perdieron sus vidas", declaró. "Puedo decir, no obstante, que en estos momentos todos los indicios señalan que fue un terrible accidente y no el resultado de una acción hostil", añadió.

Por su parte, un portavoz de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), citado por la BBC, aseguró que "de momento está descartada la acción enemiga" y que la causa del incidente pudo ser un "fallo técnico".

El incidente se produjo a unos 20 kilómetros al oeste de Kandahar, en cuya provincia está destinado un importante contingente de soldados canadienses. Según el Ministerio británico de Defensa, entre los muertos figuran 12 miembros de la Fuerza Real del Aire, un miembro de la Armada Real y un soldado del Ejército. Un portavoz de la ISAF, el comandante Scott Lundy, aseguró poco después del siniestro que no había indicios de "ataque enemigo".

No obstante, un supuesto portavoz de los talibán reivindicó posteriormente en nombre de la milicia islámica la caída del aparato. "Utilizamos un misil para derribar el aparato", declaró Abdul Jaliq. La reivindicación no ha sido verificada por fuentes independientes.

AL MENOS 17 MUERTOS

Los 14 militares británicos se unen a las al menos 17 personas fallecidas en las últimas 24 horas, entre milicianos talibán y policías afganos, en diversos enfrentamientos a lo largo y ancho del país.

La Policía afgana mató a última hora de ayer a siete presuntos talibán en dos incidentes separados en el sur de Afganistán, según informaron hoy fuentes policiales.

Según informó el jefe del distrito de Garamsair, cuatro talibán murieron en un intercambio de disparos con policías afganos en Garamsair, en la provincia de Zabul, sur del país. Ningún agente sufrió heridas. Los otros tres insurgentes murieron en un tiroteo registrado también ayer tras una redada en un escondite de los talibán en una zona remota de la provincia de Zabul, según el jefe de la Policía de la provincia, Noor Mohamed Paktin.

Por otra parte, cuatro policías y tres supuestos milicianos talibán murieron anoche en un enfrentamiento en el suroeste de Afganistán, según informó hoy el gobernador de la provincia de Nimroz, Ghulam Dasthaqir.

Los milicianos tendieron una emboscada contra un convoy que trasladaba al jefe de la Policía de distrito de Jash Rod, en Nimroz, y causaron la muerte del propio jefe, Yuma Jan, y de tres agentes que le acompañaban, precisó Dasthaqir. La Policía respondió al ataque y abatió a tres milicianos, añadió el gobernador. El resto de asaltantes se dio a la fuga y dejó abandonados dos fusiles de asalto.

En otro incidente armado, presuntos talibán mataron a tres policías afganos e hirieron a otros dos en un ataque contra un puesto de control en el sur de Afganistán, según informó hoy la Policía.

El ataque tuvo lugar ayer en el distrito de Grieshk, en la provincia de Helmand, unos 500 kilómetros al suroeste de Kabul, informó el jefe de la Policía del distrito, Ghulam Nabi Malajail. Según explicó, los agentes respondieron a los disparos, pero se desconoce si hubo alguna víctima entre los rebeldes.

Malajail indicó que los talibán huyeron después del ataque, y que la Policía continúa buscándoles. Asimismo, en otro punto del distrito de Grieshk tuvo lugar un tiroteo entre talibán y agentes de Policía, sin que se produjeran víctimas.

EL CULTIVO DE OPIO

Por si fuera poco, un informe de la ONU reveló hoy que el cultivo de opio ha aumentado en Afganistán un 59 por ciento este año, hasta las 6.100 toneladas, un récord histórico que supera en un tercio el consumo de heroína en todo el mundo.

El jefe antidrogas de la ONU, Antonio María Costa, dijo que los resultados de la investigación anual de su agencia sobre la cosecha de amapola en Afganistán eran "muy alarmantes". "La cosecha de este año será de alrededor de 6.100 toneladas de opio, un increíble 92 por ciento del total mundial. Supera el consumo mundial en un 30 por ciento", declaró Costa a la prensa en Kabul, tras presentar los resultados de la investigación al presidente Hamid Karzai. El opio es la materia básica para la obtención de la heroína.

Costa indicó que el Gobierno afgano debería emprender más acciones contra la corrupción y que los gobernadores y jefes de policía de las provincias productoras de opio deberían ser despedidos y encausados. Acusó asimismo a funcionarios corruptos de quedarse con el dinero de los organismos de ayuda internacional.

La mayor parte del incremento se ha dado en la violenta provincia de Helmand, donde los cultivos crecieron un 162 por ciento y conforman el 42 por ciento del total de la producción afgana. La provincia es el epicentro de los ataques de los rebeldes encabezados por el depuesto régimen talibán contra fuerzas de la OTAN.

"La opinión pública está cada vez más frustrada por el hecho de que el cultivo del opio en Afganistán se ha disparado. El opio afgano mantiene a a los rebeldes en el oeste de Asia, a las mafias internacionales y causa 100.000 muertes por sobredosis cada año", expresó Costa.