Destinará 10 millones de euros a la población del sur del país y pide a las partes abrir pasillos humanitarios
BRUSELAS, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea se volcará en el terreno humanitario a la vista de que los reiterados llamamientos a Hezbolá e Israel para detener los ataques iniciados hace hoy nueve días no han surtido efecto y la situación de la población civil del sur de Líbano, la más afectada por los enfrentamientos, es calificada ya de "catastrófica" por las agencias humanitarias.
Respondiendo a peticiones expresas de las organizaciones que trabajan en la zona, la Comisión Europea decidió hoy elevar hasta los 10 millones de euros los fondos que hará llegar a las víctimas del conflicto, al tiempo que exigió a las partes respetar las normas del Derecho Internacional Humanitario y abrir pasillos que faciliten la labor de las agencias humanitarias para que la ayuda de emergencia pueda llegar a sus destinatarios.
Esta cantidad, gestionada por el Departamento que dirige el comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel y canalizada a través de agencias de Naciones Unidas, la Cruz Roja Internacional y organizaciones no gubernamentales ya presentes en el terreno, podría estar en su destino en un periodo máximo de entre 48 y 72 horas, según anunció el portavoz de Michel, Amadeu Altafaj.
La insistencia en abrir vías de acceso para que llegue la ayuda por medios logísticos terrestres se debe también a que el coste de los envíos de emergencia por medios aéreos quintuplica el presupuesto, según los expertos.
El portavoz de Michel admitió que toda la información que recibe la Comisión Europea de sus socios en la región indica que nos enfrentamos a una "seria crisis humanitaria" y, a título de ejemplo, mencionó que en este momento hay medio millón de desplazados internos en el sur de Líbano, cifra que podría alcanzar rápidamente el millón si continúan los enfrentamientos.
También indicó que Bruselas desearía que el conflicto tocara a su fin con rapidez pero a la vista de que este no parece el caso está dispuesta a incrementar la ayuda de emergencia si las necesidades aumentan.
No obstante, evitó valorar a quienes, como el anterior comisario de Relaciones Exteriores, Chris Patten, opinan que la UE suple su falta de fuerza política en Oriente Próximo actuando como una organización humanitaria. "En todas las situaciones donde se produce una crisis humanitaria es muy importante separar lo político de lo humanitario", dijo Altafaj.
"Es esencial, porque ahí es precisamente donde reside la fuerza del Derecho Internacional Humanitario", agregó. En este sentido, recordó que Bruselas aporta ayuda humanitaria en todos los escenarios de crisis, desde Corea del Norte a Chechenia pasando por América Latina y que, en el caso de Oriente Próximo lo hace desde hace treinta años.
"No hacemos distinción entre víctimas", insistió tras considerar que, desde el punto de vista político, la UE es "muy activa", está "muy implicada" en la crisis y juega un papel importante en el seno del llamado Cuarteto, formado también por Estados Unidos, Naciones Unidas y Rusia.
Por su parte, el primer ministro finlandés y presidente de turno de la Unión Europea, Matti Vanhanen, reiteró hoy desde Finlandia el llamamiento a las partes para que pongan fin a la violencia.
"La UE está dispuesta a ayudar", dijo tras resaltar que será necesario el despliegue de una fuerza internacional en el sur de Líbano aprobada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas pero que, en cualquier caso, todas las partes inmersas en el conflicto deben comprometerse a decretar un alto el fuego.
"La violencia debe detenerse, los ataques con cohetes deben detenerse y los soldados secuestrados deben ser puestos en libertad. Israel tiene derecho a defenderse, pero su reacción debe ser apropiada", agregó Vanhanen, que se reunió hoy en la localidad finlandesa de Pori con el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso.
Aseguró que los Veinticinco están "sumamente preocupados" y que serán muy activos para trabajar en la solución de la crisis, aunque dejó claro que la solución requiere "las condiciones adecuadas" para que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas pueda tomar una decisión. "Todo esto requiere un duro trabajo, sobre todo a nivel diplomático", dijo.
Desde Finlandia, Barroso presumió de que esta ayuda es una "expresión de solidaridad" de la UE hacia los civiles que están sufriendo por "este terrible conflicto". A su juicio, sólo las partes pueden lograr una solución y el resto sólo puede ayudar "creando mejores condiciones".
MINIMO DE ENTENDIMIENTO
"Cuando se produce esta clase de conflicto, esta clase de odio, esta clase de guerra, nada puede hacerse desde fuera si las partes no son las primeras en alcanzar un mínimo nivel de acuerdo", indicó Barroso en conferencia de prensa en Pori. "Necesitamos un mínimo de entendimiento sobre el terreno. Lamentablemente, no parece que sea el caso, al menos hasta ahora", agregó.
También la Eurocámara se sumó a la preocupación humanitaria y reclamó a las partes el cese de las hostilidades, el restablecimiento de la legalidad internacional y permitir hacer llegar la ayuda a las víctimas que se está cobrando el conflicto.
La conferencia de presidentes de los grupos políticos del Parlamento Europeo se reunió hoy en sesión extraordinaria en Bruselas para analizar la crisis en Oriente Próximo y en una resolución aprobada por unanimidad se reclama la inmediata liberación de los soldados israelíes secuestrados y de todos los miembros del Gobierno de Hamás y del Consejo Legislativo Palestino detenidos por las tropas israelíes.
El Parlamento apoya el despliegue de una fuerza de estabilización en la zona, auspiciada por Naciones Unidas con participación de los países de la Unión Europea, y pide a todas las instituciones comunitarias "hablar con una sola voz" para hacer frente al conflicto.
Asimismo, apuesta por la apertura de negociaciones en el marco de Naciones Unidas con la participación de todos los países y autoridades de la región. De igual forma, hace un llamamiento a la Comisión Europea para que desbloquee todos los fondos posibles destinados a la ayuda humanitaria para las víctimas del conflicto en toda la región y para los refugiados en Chipre.
