Crónica Ucrania.- Las elecciones anticipadas de mañana pretenden acabar con más de un año de bloqueo político en Ucrania

Actualizado: sábado, 29 septiembre 2007 13:39

El presidente Yuschenko consigue organizar in extremis una coalición con el bloque de Timoschenko

MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -

La política ucraniana se enfrenta mañana a una prueba decisiva para intentar devolver la estabilidad al país, con unas elecciones parlamentarias anticipadas que buscan poner fin a cinco meses sin Cámara Baja, precedidos de otros ocho marcados por el boicot parlamentario y el ya casi histórico enfrentamiento entre el presidente Victor Yuschenko y el primer ministro, Victor Yanukovich, con Yulia Timoshenko como tercera parte invitada y posible socia de coalición.

Pero en realidad, la ex república soviética vive inmersa en el caos desde la Revolución Naranja de 2005. Tras las elecciones presidenciales realizadas inmediatamente después de la misma, Yuschenko derrotó a Yanukovich que no obstante, un año después, conseguía el cargo de primer ministro tras el éxito de su grupo en las Parlamentarias de 2006. Desde ese momento, el presidente ucraniano ha vivido con el temor a un hipotético "golpe de estado", de ahí su interés por conservar su poder de veto presidencial que le otorga la Constitución del país.

A partir de ese momento, Ucrania contó con dos bloques políticos opuestos y en permanente estado de conflicto: un Parlamento gobernado por la Coalición para la Unidad Nacional del primer ministro y una oposición liderada, de facto, por el presidente Yuschenko. La tensión creciente culminó el pasado 2 de abril, cuando el presidente decretó la disolución del Parlamento justo cuando estaba a punto de aprobarse una ley que permitiría eliminar los poderes de veto presidencial. El primer ministro consideró ese decreto como anticonstitucional y, empleando la mayoría de la que gozaba en la Cámara Baja, prohibió la financiación de todo tipo de comicios.

El mes de abril fue testigo de una parálisis total, con la intervención del Tribunal Constitucional, una declaración de inconstitucionalidad por parte del Consejo de Europa e incluso, el asomo de un conflicto aún más serio, cuando presidente y primer ministro discutieron airadamente sobre quién obtenía el control de las fuerzas de seguridad. Finalmente, tras una decisión adoptada en conjunto por Yuschenko, Yanukovych y el presidente de la Rada Suprema, la fecha de las elecciones fue finalmente fijada, y la campaña electoral comenzó el 2 de agosto.

RESULTADOS AJUSTADOS

Las encuestas no anticipan un resultado claro. Tras el primer sondeo, publicado en agosto por la Agencia Independiente de Información de Ucrania, la coalición del primer ministro formada por Partido de las Regiones (PR) y el Partido Comunista obtendría 228 escaños de los 450 que componen el Parlamento ucraniano. El otro combinado político formado por el partido del presidente, Nuestra Ucrania-Bloque de la Autodefensa Popular (NUAP) junto con el Bloque Yulia Timoschenko, se llevaría 228. El objetivo es conseguir una mayoría parlamentaria que garantice un reciclaje político y, de momento, es algo imposible.

Los resultados de los últimos sondeos de septiembre reflejan cambios mínimos: el PR, de Yanukovich descendió del 28,5% al 26,6% en intención de voto, mientras que la NUAP, subió del 15% al 18,2%, según comunicó el lunes Nikolai Mijalchenko, director del Servicio Sociológico Nacional, en declaraciones recogidas por RIA Novosti.

Si finalmente mantiene su cargo como presidente, Yuschenko intentará culminar, en su nuevo mandato, su ansiado sueño: la incorporación de Ucrania en la OTAN y la UE. Por su parte, el prorruso Yanukovich, opuesto a la entrada a la Alianza Atlántica, ha prometido incorporar el ruso como segunda lengua oficial, pero también afirma hacer lo posible para mejorar sus lazos con Europa. En general, sin embargo, todos los candidatos han prometido incrementar el bienestar de la población.

El PR "se pasó con las promesas electorales" y "no debía haber sacado del basurero la idea de un referéndum sobre la co oficialidad del idioma ruso" porque el asunto preocupa, como máximo al 8-9% de los ciudadanos, explicó el experto. La subida de NUAP, según él, es atribuible al hecho de que el presidente Víctor Yuschenko "desenvainó la espada": al ordenar, entre otras medidas, la destitución de los ministros de Transporte y Situaciones de Emergencia y derogar varias disposiciones del Gabinete, actuación que despierta simpatías entre la población.

Además, con la ayuda del bloque de Timoschenko, las oportunidades de victoria del presidente han aumentado exponencialmente. La candidata aceptó el pasado jueves formar parte de la coalición, y aportar el 20 por ciento de intención de voto que le conceden las últimas encuestas, y cerrando así la herida abierta con el presidente, que la destituyó de su cargo de primera ministra en 2005 entre presuntas acusaciones de corrupción.

CUESTIONABILIDAD ELECTORAL

Otro de los grandes problemas es que las elecciones se están celebrando en unas bases legales obviamente insuficientes y en algunas ocasiones francamente cuestionables. En muchas regiones, los responsables de las administraciones regionales y de distrito fueron también nombrados responsables de los comités electorales del bloque del presidente, aumentando las dudas respecto a la legalidad y transparencia de las elecciones en las regiones señaladas por los fieles y dependientes partidarios del presidente.

Por este motivo, las elecciones estarán supervisadas por la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa, para la que Rusia aportará 134 observadores, según comunicó ayer Vsévolod Loskutov, consejero de la embajada rusa en Kiev.

Alrededor de 60 rusos - en primer lugar, los diplomáticos - van a trabajar en el marco de la misión de observación enviada por la OSCE (Organización de Seguridad y Cooperación en Europa). Los demás integrantes de la delegación rusa, encabezada por el embajador Víctor Chernomyrdin, representan a la Duma de Estado y al Consejo de la Federación, respectivamente la Cámara baja del Parlamento y el Senado.

CONSECUENCIAS

Ahora todo depende de los 45 millones de ucranianos con capacidad de voto y, principalmente, del 29 por ciento de indecisos que los candidatos están intentando recuperar estos días. El analista del centro de estudios políticos Penta en Kiev, Volodimir Fesenko, estima que la única solución para salir de la crisis consiste en "la formación rápida de una coalición".

Para Mijail Pogrebinski, sin embargo, "podría abrirse un nuevo período de inestabilidad", dado que el partido derrotado podría no reconocer el resultado de las elecciones y organizar manifestaciones, o incluso intentar invalidar el nuevo Parlamento ante los tribunales, según Pogrebinsky.

Dichas manifestaciones han tenido lugar. Ayer viernes, último día de campaña, seguidores de Yanukovich organizaron una sentada en la Plaza de la Independencia de Kiev, símbolo de la Revolución Naranja. Por su parte, el Partido de las Regiones y el Bloque Timoschenko organizaron similares encuentros en la misma zona y en la plaza que se encuentra enfrente de la catedral de Santa Sofía.