El número de casos denunciados en España se duplicó hasta alcanzar los 79, el 9% del total comunitario
BRUSELAS, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
Casi la mitad de los productos peligrosos retirados del mercado en 2006 en la Unión Europea (440; el 48%) procede de China, mientras que un 21% tiene su origen en los antiguos Veinticinco. Por primera vez, los juguetes son la categoría más denunciada (24%), superando a los aparatos eléctricos que ocupaban tradicionalmente la posición de cabeza. A continuación se sitúan vehículos de motor (14%), material de iluminación (11%) y cosméticos (15%), según el informe anual publicado hoy por la Comisión Europea.
Para hacer frente al gran número de productos peligrosos que llegan de China, el Ejecutivo comunitario ha intensificado su cooperación sobre seguridad con el país asiático. Teniendo en cuenta que China se ha convertido rápidamente en uno de los mayores exportadores de artículos de consumo a Europa, en 2006 Bruselas firmó un memorando de acuerdo y un plan de trabajo para unos juguetes más seguros, a fin de mejorar la seguridad de los productos importados, según explicó a través de un comunicado.
El plan de trabajo, que contó con el respaldo tanto de las asociaciones de productores de juguetes europeas como de las chinas, incluye medidas prácticas sobre formación y asistencia técnica, intercambio de información entre la UE y China y mecanismos de seguimiento de los artículos peligrosos. También recoge el compromiso de las autoridades chinas de reforzar la inspección y supervisión de los juguetes exportados a Europa.
En total, el año pasado los países de la UE notificaron a RAPEX --el sistema de alerta rápida de la UE para productos de consumo no alimentarios-- medidas restrictivas que afectaban a 924 productos peligrosos, frente a las 701 de 2005, lo que representa un incremento del 32%.
A través de RAPEX, las autoridades nacionales comunican a la Comisión los productos que presentan un riesgo grave para la salud y la seguridad de los consumidores, experto los alimentos, los productos farmacéuticos y los productos sanitarios. Entre los artículos interceptados se encuentran desde ositos de peluche hasta secadores de pelo, aerosoles de limpieza, minimotocicletas, mecheros o fijadores para botas de esquí.
Esta información se intercambia rápidamente entre las autoridades responsables de la vigilancia en 30 países europeos y, a continuación, los productos peligrosos se prohíben o bien se restringe su comercialización.
España notificó a Bruselas en 2006 un total de 79 retiradas de productos peligrosos, cifra que prácticamente duplica la registrada el año anterior y que representa el 9% del total comunitario. En primera posición se sitúa Alemania (144 notificaciones, 16% del total), seguida de Hungría (140 notificaciones, 15%), Grecia (98 notificaciones, 11%) y Reino Unido (92 notificaciones, 10%).
Destacan el escaso número de denuncias en países grandes como Francia (40, 4%), Polonia (17, 2%) y sobre todo Italia (6, 1% del total). La Comisión reclamó una mayor participación de todos los Estados miembros de la UE en RAPEX y pidió una mayor cooperación entre las autoridades de vigilancia del mercado y aduanas nacionales.
"Este sistema de alerta rápida es un poderoso medio de supervisión y un excelente ejemplo de valor añadido europeo", declaró la comisaria responsable de Protección de los Consumidores, Meglena Kuneva. "El constante incremento del número de medidas notificadas es un buen signo, que muestra que la vigilancia está mejorando a través de Europa", añadió a través de un comunicado.
TIPOS DE RIESGO
Más del 40% de las notificaciones se refieren a medidas voluntarias tomadas por las empresas, lo que representa un fuerte incremento respecto al año interior y, según el Ejecutivo comunitario, es un claro indicador de la creciente sensibilización de los agentes económicos europeos en relación con las cuestiones de seguridad.
En cuanto a las principales categorías de riesgo denunciadas, la más importante son las lesiones (274 notificaciones, el 25%), el shock eléctrico (270 notificaciones, el 24%), el riesgo de incendio o quemaduras (194 notificaciones, el 18%), la asfixia (157 notificaciones, el 14%) y los riesgos químicos (95 notificaciones, el 9%).
Entre los casos de especial preocupación que recoge el informe destaca el alto número de minimotocicletas no seguras que se detectaron durante la primera mitad de 2006. Varios Estados miembros informaron de serios defectos de diseño y fabricación que en algunos casos habían causado graves accidentes. Bruselas pidió que se tomaran las medidas necesarias para proteger la seguridad de los usuarios, incluyendo la retirada del mercado de estos productos.
Otro caso grave se registró en Alemania en marzo del año pasado, cuando se produjeron 110 incidentes de salud relacionados con el uso de un spray. La empresa productora lo retiró del mercado voluntariamente. Finalmente, el informe recoge la obligación, que entró en vigor el pasado 11 de marzo, de que los mecheros vendidos en la UE incluyan mecanismos de seguridad a prueba de niños.
