El comisario de Transportes endosa el fracaso a Loyola de Palacio por reenviar el texto a la Eurocámara sin suficientes modificaciones
ESTRASBURGO (FRANCIA), 18 (EUROPA PRESS)
El pleno del Parlamento Europeo rechazó hoy, por segunda vez en tres años y por amplia mayoría, una propuesta de directiva de la Comisión Europea que perseguía abrir a la competencia los servicios portuarios.
La práctica totalidad de los eurodiputados socialistas, verdes y de izquierda unitaria, así como buena parte de los populares y liberales --que se mostraron divididos sobre la iniciativa-- dijeron que no a la misma y sumaron 532 votos. Los miembros españoles del PPE votaron a favor.
El comisario de Transportes, el francés Jacques Barrot, lamentó que el Parlamento no se hubiera pronunciado sobre el texto enmendado por la comisión parlamentaria correspondiente.
Asimismo, endosó el nuevo fracaso cosechado por la normativa de puertos a su antecesora en el cargo, la ex comisaria y miembro del PP Loyola de Palacio, cuya propuesta ya fue derrotada en 2003 por la Eurocámara. Según declaró Barrot a la prensa, fue De Palacio quien remitió el texto al Parlamento Europeo "insuficientemente corregido".
"Hubo modificaciones, pero el nuevo texto no fue bastante claro en algunos aspectos como la autoasistencia o los plazos, que eran insuficientes para los inversores y al final las empresas portuarias lo han rechazado", explicó. "Yo asumiré mis responsabilidades, pero no las de los demás", abundó Barrot.
En todo caso, se comprometió a sacar las conclusiones "pertinentes" de la opinión de la Cámara y trasladarla al colegio de comisarios. No obstante, evitó adelantar si retirará la polémica directiva, que ha puesto en pie de guerra al colectivo de los estibadores, protagonistas el pasado lunes de una violenta manifestación en Estrasburgo para protestar por las pretensiones liberalizadoras de Bruselas.
También reclamó no perder de vista el objetivo del texto, para que los puertos puedan responder eficazmente al aumento del tráfico marino y a la saturación de la capacidad portuaria".
Barrot dijo que se trabajará con todos los interesados --Estados, operadores, usuarios y sindicatos-- en concertación con el Parlamento Europeo "para sentar las bases de una política europea de puertos que pueda dar seguridad a los inversores".
LA DIRECTIVA NAUFRAGA
El Grupo Socialista de la Eurocámara se felicitó del resultado y resaltó que la iniciativa está "muerta". "Ahora los puertos se pueden concentrar otra vez en su trabajo", señalan los socialistas en un comunicado en el que resumen así lo sucedido hoy en Estrasburgo: "la directiva naufraga en el Parlamento".
Los Verdes, por su parte, la directiva era "para empezar, completamente inútil desde el punto de vista económico y además peligrosa, dado que quería introducir el principio de autoasistencia".
Los ecologistas critican también que Bruselas no haya tenido en cuenta el voto anterior de la Eurocámara y haya vuelto a presentar una iniciativa casi idéntica que ha amenazado la calidad del servicio y el futuro de decenas de miles de estibadores de la Unión Europea.
Mientras, la patronal europea, UNICE, considera que "mejorar la eficacia en los servicios y la gestión de los puertos y trabajar en ambos aspectos es un elemento necesario para abordar el paulatino aumento de las necesidades de transporte", señala el secretario general de UNICE, Philippe de Buck, en un comunicado.