HIALEAH (ESTADOS UNIDOS), 17 (EP/AP)
Un grupo de refugiados cubanos fue puesto en libertad este sábado un día después de llegar a tierra estadounidense, concretamente a un puente abandonado en los Cayos, Florida, que las autoridades dijeron que no era territorio estadounidense. De esta forma, el grupo podrá finalmente reunirse con familiares que ya escaparon de la isla años antes.
Entre ellos se cuenta Osniel Hernández, de 14 años, que se fue a casa de su madre, Mariela Conesa. No se habían visto desde que ella llegó en una balsa a Estados Unidos en 1998.
El niño, su padre y otros 14 cubanos llegaron a los Cayos en la madrugada del viernes, en un barco casero. Para algunos, fue la segunda ocasión en un año en la que completaban el viaje hasta el puente.
En enero, el muchacho y su padre, Marino Hernández, formaban parte de un grupo de 15 cubanos que fueron enviados de regreso a la isla porque las autoridades estadounidenses dijeron que el puente abandonado no era parte de su competencia.
Según la política estadounidense para estos casos, los cubanos detenidos en el mar son enviados de regreso a la isla, mientras que quienes logran llegar a tierra firme pueden quedarse en el país.