Blair y Persson renuncian a parte de las reuniones para ver jugar a sus selecciones
BRUSELAS, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los jefes de Estado y Gobierno de la UE, que se reúnen hoy y mañana en Bruselas, no pueden evitar estar pendientes, al menos en parte, del Mundial de Fútbol que se celebra en la vecina Alemania, aunque los partidos coincidan con las sesiones de trabajo del Consejo Europeo.
El primer ministro austriaco y presidente de turno de la UE, Wolfgang Schuessel, que recibió a los dirigentes a su llegada al edificio del Consejo, elogió ante el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, el buen juego de la selección española, que ayer ganó 4-0 a Ucrania en su primer partido del Mundial.
"Schuessel y Zapatero comparten que España puede ganar el Mundial", dijo un sonriente secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, en su primera comparecencia ante los medios. Schuessel calificó de "espectaculares" los 20 primeros minutos de juego de la selección española.
Por su parte, el primer ministro sueco, Goran Persson, insinuó que se perderá la cena en la que sus colegas abordarán cuestiones relacionadas con la inmigración y posiblemente también con la ampliación de la UE, porque a las 21:00 horas su selección se enfrenta a Paraguay. "¿Quién ha dicho que yo voy a ir a la cena?", dijo Persson a su llegada al Consejo, cuando una periodista le preguntó si no estaría su corazón dividido.
En cuanto al británico Tony Blair, fuentes de su delegación confirmaron que el 'premier' vio el final del primer tiempo del partido entre Inglaterra y Trinidad y Tobago, y la mayor parte del segundo tiempo. El partido terminó con un 2-0 a favor de los británicos.
Mañana, la Cumbre europea termina antes del almuerzo, de modo que el primer ministro holandés, Jan Peter Balkenende, podrá ver sin problemas el enfrentamiento entre su selección y Costa de Marfil.
Un total de 10 de los 25 jefes de Estado y Gobierno reunidos en Bruselas tienen a sus selecciones de fútbol desplazadas en Alemania. Junto al anfitrión, participan en el Mundial Polonia, Inglaterra, Suecia, Países Bajos, Portugal, Italia, República Checa, Francia y España.
No es, sin embargo, la primera vez que en un Consejo Europeo los dirigentes están pendientes del fútbol. En la Cumbre de Sevilla, en junio de 2002, la derrota de España ante Corea del Sur aguó parte de la segunda jornada de trabajos al entonces presidente del Gobierno, José María Aznar. El partido, desenlace con penaltis incluido, fue seguido sólo en parte por Aznar, pero intensamente por los periodistas, ya que la organización lo retransmitió por las pantallas habitualmente destinadas a informar sobre la Cumbre.
