WASHINGTON 15 Sep. (EP/AP) -
Varios países, entre ellos Irán, Arabia Saudí y China, están violando los derechos de la gente a practicar su religión, según denunció hoy el Gobierno estadounidense.
En su informe al Congreso, el Departamento de Estado acusó directamente a Birmania, China, Eritrea, Irán, Corea del Norte, Arabia Saudí, Sudán y Vietnam.
"Aunque la democracia y el respeto a los derechos básicos han avanzado en todo el mundo, muchos gobiernos aún sólo ofrecen retórica en vez de cumplir sus responsabilidades con la Declaración Universal de Derechos Humanos y otros acuerdos internacionales", señaló en un comunicado John V. Hanford III, embajador estadounidense itinerante a cargo de asuntos de libertad religiosa.
En Irán, un "ambiente amenazante" está causando un deterioro de la ya restringida libertad de culto para todas las minorías, consideró el informe.
Los bahá'i y los musulmanes sufíes, además de otras minorías que no son reconocidas por la Constitución, tienen prohibido practicar sus creencias, señala el documento, que abarca un año de investigación hasta el 30 de junio.
Asimismo, denunció a la Autoridad Palestina por ayudar a pandillas locales a arrebatarle tierras a cristianos, y recordó que en Arabia Saudí el islam es la religión oficial y exclusiva. Allí todos los ciudadanos tienen que ser musulmanes y está prohibida la práctica de otras creencias.
Aun así, reconoció que el Gobierno saudí ha emprendido una campaña contra el extremismo islámico y que el rey Abdulá y otros miembros del Gobierno han predicado la tolerancia.
En Sudán, sostuvo, ha habido cierta mejora pero en el norte del país el Gobierno negó licencias para la construcción de iglesias cristianas y exigió el estudio del islam en todas las escuelas.