BAGDAD, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El jefe de las fuerzas estadounidenses en Irak, general George Casey, declaró hoy en Bagdad que las fuerzas iraquíes tendrán capacidad para asumir plenamente la seguridad del país en los próximos 12 a 18 mes con un mínimo apoyo estadounidense. Por su parte, el embajador de Estados Unidos en Irak, Zalmay Khalilzad, aseguró que tanto el Gobierno iraquí como las milicias del clérigo chií Muqtada al-Sadr han aceptado un plazo, de aquí a final de año, para reducir la violencia y estabilizar la situación política del país.
Según Casey, quien se reunió hoy con Zalmay Khalilzad, el objetivo de Estados Unidos debería seguir siendo la reducción del número de tropas en Irak, aunque advirtió de que no dudaría en pedir más efectivos si lo considerara necesario.
El militar se mostró convencido de que Estados Unidos concluirá con éxito su misión en Irak, aunque advirtió que hay que ser pacientes. Asimismo, aseguró que las fuerzas estadounidenses aún no han perdido ninguna batalla desde que comenzó la guerra en Irak y que la célula de la red terrorista Al Qaeda en Irak está herida pero "sigue siendo letal". Por otra parte, el general Casey informó de que el Ejército iraquí ha perdido 300 hombres sólo durante el mes sagrado del Ramadán.
Por su parte, Zalmay Khalilzad aseguró que el Gobierno iraquí ha aprobado un plazo, de aquí a final de año, para reducir la violencia, e informó de que las milicias de Al-Sadr, el Ejército del Mhedi, también han aceptado las exigencias de Estados Unidos para reducir la reducción de la violencia y estabilizar la situación política antes de que acabe 2006. Tanto el embajador como el jefe militar acusaron a Irán y Siria de socavar los esfuerzos de Estados Unidos para estabilizar Irak.