BRUSELAS 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, Dick Marty, criticó hoy, durante su intervención ante la comisión temporal del Parlamento Europeo que investiga la supuesta complicidad de los Gobiernos europeos en las actividades de la CIA, que Estados Unidos no considere el actual sistema judicial "adecuado" para luchar contra el terrorismo.
Marty, que dirige la investigación del Consejo de Europa sobre las supuestas actividades ilegales de la CIA en el continente, comenzó su intervención dejando claro que la lucha contra el terrorismo es "indispensable" y nadie puede imaginar que tenga que debilitarse.
"Todo lo contrario --argumentó--. La colaboración entre los estados y con la Administración norteamericana es crucial". El problema, a su modo de ver, es que los "amigos y aliados" norteamericanos piensan que los actuales sistemas procesal y penal no son "instrumentos adecuados para luchar contra el fenómeno del terrorismo" y que el "derecho de guerra" no está adaptado a esta lucha.
Esto es algo que, en opinión de Marty, Estados Unidos ha demostrado con los hechos, al haber creado Guantánamo fuera de territorio norteamericano y donde no rigen las mismas leyes. "Y este punto es el que debe interrogarnos", siguió el responsable del Consejo de Europa, quien destacó también que, tras el 11-S, se produjo una "ausencia de claridad, de transparencia y de reacción por parte de los gobiernos europeos". También puso el acento en el "vacío jurídico", ante la "arbirtrariedad" del principal socio de Europa en su lucha contra el terrorismo.
SECRETISMO
Como ya hiciera en su informe preliminar, Marty dudó de que las actividades sobre las que se quiere arrojar luz se llevaran a cabo sin conocimiento de los Gobiernos. "¿Cabe imaginar que acciones de la envergadura que hemos visto sucediera sin que hubiera asistencia o conocimiento de nuestros servicios de inteligencia, que están para eso?", se preguntó.
"Francamente --continuó-- si ninguno de nuestros servicios secretos se ha percatado de algo de esto,¡válgame Dios. Es preocupante!". Marty prosiguió diciendo que las investigaciones se siguen topando con "el muro de la pasividad" y puso como ejemplo que, hasta la fecha, nadie en Italia ha protestado a nivel diplomático por el secuestro del religioso musulmán Abú Omar, que había recibido el estatus de refugiado político.
"Tenemos la cultura del secretismo", se dolió el responsable del Consejo de Europa quien a continuación pidió responder a la cuestión de si el secreto es "legítimo" cuando uno se enfrenta actividades delictivas o violaciones de los derechos humanos. También animó a la comisión parlamentaria, cuando se encuentren con dificultades para obtener información, a decidir entre "intereses diplomáticos efímeros" y los valores fundamentales que son la base de la cultura europea.
Finalmente, apuntó que el espíritu que anima su trabajo y que debería animar el de la comisión parlamentaria no es el de "poner en la picota" a los países o los gobiernos sino poner a disposición de éstos instrumentos de lucha contra el terrorismo que respete los "valores" europeos.