NUEVA YORK 19 Dic. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -
La primera dama estadounidense, Laura Bush, fue intervenida quirúrgicamente el pasado mes de noviembre para extirparle un tumor cancerígeno en la piel de la pierna derecha a la altura de la pantorrilla. La intervención no exigió el ingreso de la primera dama y tenía un pronóstico favorable, ya que fue detectado precozmente.
Según 'The New York Times', el silencio informativo acerca de la intervención responde al carácter privado de la misma, tal y como aseguró la secretaria de prensa de Laura Bush, Susan Whitson, quien restó importancia subrayando el hecho de que se utilizara anestesia local y el carcinoma fuera detectado rápidamente.
Los servicios sanitarios de la Casa Blanca decidieron llevar a cabo una biopsia de una llaga que no cicatrizaba y descubrieron que en realidad se trataba de un carcinoma de células escamosas, un tipo de cáncer de piel que se desarrolla en las capas intermedias de la epidermis y supone el 20% de todos los casos de cáncer de piel.