NUEVA YORK 5 Dic. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -
El vertido de 85.000 kilos de productos tóxicos después de que el tren que los transportaba descarrilara esta mañana en Illinois obligó a las autoridades locales a evacuar alrededor de 70 hogares ante el riesgo de contaminación del área, si bien las autoridades no registraron víctimas mortales.
El tren realizaba la ruta que une Chicago con Houston y descarriló sin que, hasta el momento, se conozcan las razones del accidente. Una decena de personas fueron trasladas al hospital con síntomas leves de intoxicación en ojos, boca y nariz, pero la liberación del contaminante ha afectado incluso al personal de socorro.
En total dos locomotoras y 21 vagones de un total de 83 que componían el tren, propiedad de Union Pacific, se salieron de la vía y vertieron en la zona próxima a la localidad de Christopher -a unos 120 kilómetros al sur de San Luis- aditivos para aceite lubricante y un lubricante para combustible diesel.