CARBON (TEXAS, EEUU), 3 Ene. (EP/AP) -
Los servicios de Bomberos continúan luchando para contener los fuertes incendios de zonas de pasto en Texas que han arrasado decenas de viviendas y algunas pequeñas poblaciones.
Asimismo, otros incendios en la zona azotada por una fuerte sequía devastaron miles de hectáreas en los estados de Oklahoma y Nuevo México y obligaron a la evacuación de centenares de personas.
Las autoridades advirtieron de que debido al tiempo seco y ventoso persistía el peligro agudo de incendios. "No sabemos dónde estaremos hoy", dijo el jefe de bomberos de Oklahoma City, Brian Stanaland. "A esta altura pensamos que toda la ciudad está en peligro por los incendios de los pastizales".
Varios estudios indicaron que no se producirán lluvias durante los próximos días, dijo Jesse Moore, del servicio meteorológico en Fort Worth. Asimismo, indicó que las últimas precipitaciones apreciables fueron de 6 milímetros de lluvia el pasado 20 de diciembre.
El incendio más grande en Texas afectó a casi 9.100 hectáreas en el distrito de Eastland al oeste de Dallas. Las autoridades enviaban más helicópteros y aviones a combatir las llamas que amenazaban las poblaciones de Carbon, Gorman y Desdemona, informó la portavoz Traci Weaver.
Las comunidades de Ringgold y Kokomo, donde vivían unas 125 personas en total, fueron arrasadas por las llamas, dijo Weaver. Decenas de incendios cubrieron de nubes negras el paisaje de Oklahoma. Vientos de hasta 80 kilómetros por hora extendían los focos, incluso en Oklahoma City, la capital del estado, donde dos vecindarios debieron ser evacuados.
En total, decenas de incendios devastaron más de 2.000 hectáreas y destruyeron por lo menos una decena de viviendas en todo el estado, dijo Michelann Ooten, portavoz del departamento de emergencias.
En Nuevo México, los socorristas realizaban tareas de limpieza el lunes después de que cuatro incendios en la zona de Hobbs arrasaron 26 hectáreas de pastos y quemaron decenas de viviendas y graneros.
