MADRID, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
Soldados egipcios han comenzado este miércoles a retirar tiendas de campaña que aún permanecían en la plaza Tahrir de El Cairo y han pedido a los manifestantes que siguen en esta zona, epicentro de las protestas que derrocaron al régimen de Hosni Mubarak, que abandonen la zona.
La medida ha sido adoptada después de que decenas de personas atacasen con piedras a los cientos de manifestantes que se encontraban en la plaza. Algunos grupos han seguido en el lugar tras la dimisión de Mubarak, y la concentración en Tahrir crece significativamente los viernes, cuando se celebran nuevos actos para pedir a las autoridades de transición que acometan las reformas solicitadas.
"Sin ningún aviso, el Ejército comenzó a atacarnos, a desmantelar el campamento y a obligarnos a abandonar el lugar", ha denunciado Rasha Azab, uno de los manifestantes, en declaraciones a 'Al Ahram'.
Las tensiones siguen latentes en la capital egipcia, donde hoy se han juntado las peticiones de evacuación dadas por los militares con las agresiones de personas que pedían igualmente el desmantelamiento definitivo del campamento que colapsó el centro de la capital. Parte de este último colectivo son trabajadores de tiendas cercanas que denuncian que los negocios se han visto afectados por las protestas.
El Ejército tuvo que intervenir para separar a los dos grupos enfrentados "después de que la situación se volviese muy seria", según Ismail Abdel Fatá. "Usaron gas lacrimógeno y dispararon balas al aire para mantener lejos a los matones", ha agregado.
Al menos 25 personas han resultado heridas como consecuencia de los disturbios, mientras que varias decenas de personas pertenecientes a los dos bandos han sido detenidas.
