MADRID 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El embajador iraní en Siria, Mohamad Reza Rauf Sheibani, ha sostenido este viernes que la toma del control de la localidad de Qusair, ubicada cerca de la frontera con Líbano, por parte del Ejército "traen estabilidad al país".
"Las recientes victorias del Ejército sirio y las fuerzas populares en Qusair han traído estabilidad a Siria. Esto reducirá los sufrimientos de la población", ha dicho, según ha informado la cadena de televisión iraní Press TV.
Poco después de la toma de la localidad, el Gobierno iraní felicitó al Ejecutivo y al Ejército sirios por la operación y resaltó que "algunas partes, que siguen apoyando la entrega de armas y los actos terroristas contra Siria, son responsables de la masacre de la población y la devastación de Siria, por lo que han de ser juzgados como criminales de guerra".
Los rebeldes confirmaron a primera hora del miércoles su retirada de Qusair. "A la vista del fuerte arsenal (del enemigo), de la falta de suministros y de la descarada intervención de (el partido-milicia chií libanés) Hezbolá, decenas de combatientes han protegido la retaguardia y han asegurado la retirada de sus compañeros junto a los civiles", dijeron.
La localidad, con más de 20.000 habitantes, se encuentra en una posición estratégica, segregada entre localidades suníes y chiíes, estas últimas afines al presidente sirio, cuya confesión alauí es una escisión de la rama chií del Islam.
Para las fuerzas gubernamentales resulta crucial mantener abierto un paso entre el valle de la Bekaa y la costa del Mediterráneo, en el caso de que caiga Damasco, que en las últimas semanas ha sido objeto del asedio rebelde.
El jueves, el Ejército aseguró haber arrebatado a los rebeldes el control de la aldea de Al Daba, ubicada en los alrededores de Qusair. En base a las primeras informaciones, Al Daba es la localidad a la que huyeron los rebeldes tras ser expulsados de Qusair junto a decenas de civiles.