Encontrado un cuerpo decapitado cerca del lugar donde Abú Sayyaf ejecutó al rehén canadiense

Actualizado: miércoles, 27 abril 2016 10:54

MANILA, 27 Abr. (Reuters/EP) -

Residentes de una isla en el sur de Filipinas han encontrado un cuerpo decapitado este miércoles, según ha informado un portavoz militar, dos días después de la ejecución de un rehén canadiense por parte del grupo islamista Abú Sayyaf.

El canadiense John Ridsdel, un antiguo ejecutivo minero de 68 años, fue capturado por Abú Sayyaf junto con otras tres personas en septiembre de 2015 mientras estaba de vacaciones en Filipinas.

Este lunes, el Ejército filipino informó de que había sido encontrada una cabeza decapitada en una isla remota, cinco horas después de que expirara el plazo para el pago de un rescate fijado por los milicianos, que habían amenazado con ejecutar a uno de los cuatro rehenes.

Los residentes encontraron la cabeza en el centro de la localidad de Jolo. Un portavoz militar dijo que dos hombres en una moto habían lanzado una bolsa que contenía la cabeza y la Policía confirmó que se trataba de Ridsdel.

Este miércoles, el portavoz del Ejército, Filemon Tan, ha informado de que se ha encontrado un cuerpo decapitado en un arroyo seco, cerca de la jungla en la que se cree que Ridsdel habría sido decapitado.

"Todavía estamos verificando si se trata del cuerpo de John Ridsdel", ha señalado Tan, añadiendo que los forenses de la Policía están realizando pruebas. "No hay marcas de sangre en la zona, lo que sugiere que el cuerpo no fue decapitado allí", ha añadido.

Abú Sayyaf es un grupo islamista pequeño pero brutal conocido por decapitar, secuestrar, atentar con bomba y extorsionar en el sur de Filipinas, un país predominantemente católico.

Riesdel y los otros tres rehenes --un noruego, otro canadiense y una filipina-- fueron secuestrados hace siete meses en el sur del país. En un vídeo publicado en marzo, apelaron a sus familias y gobiernos a garantizar su liberación.

En la grabación, explicaban que sus captores habían amenazado con decapitar a uno de ellos si no se pagaban los 300 millones de pesos de rescate por cada uno de ellos antes del lunes.