Enfrentamientos en Saná tras la condena de la represión por parte de la ONU

Protestas En Yemen
REUTERS/STRINGER AFGHANISTAN ADMINISTRATION
Actualizado: sábado, 22 octubre 2011 14:49


MADRID, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

La capital de Yemen, Saná, ha vuelto a ser este sábado escenario de enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los soldados leales al exgeneral Alí Mohsen, que apoya a los manifestantes a favor de la democracia, que habrían dejado al menos cinco muertos.

Según informa la cadena de televisión Al Yazira, cinco soldados de la primera división que comanda Mohsen y que desde hace meses apoyan a los manifestantes que reclaman la dimisión del presidente, Alí Abdulá Salé, han sido abatido por fuerzas gubernamentales. Los enfrentamientos, según la CNN, han tenido lugar en los distritos de Hasaba y Sofan.

Por otra parte, la cadena estadounidense informa, citando a residentes y testigos, de que fuerzas gubernamentales han atacado viviendas de la familia del líder de la tribu Hashid, Sadiq al Ahmar, contrario al presidente Salé. Este es el segundo ataque esta semana contra la poderosa familia Al Ahmar, que tiene residencias en los distritos de Hasaba, Sofan y Natha.

Hombres armados de la tribu liderada por Al Ahmar mantuvieron duros combates con las fuerzas leales a Salé el pasado mes de mayo en Saná, que dejaron más de 160 muertos. El líder tribal ha manifestado abiertamente su apoyo a los manifestantes que desde la plaza del Cambio en Saná y otras ciudades del país piden la renuncia de Salé tras 33 años en el poder.

RESOLUCIÓN DE LA ONU

Los nuevos incidentes en la capital se producen horas después de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobara de manera unánime una resolución de condena contra la represión de las protestas democráticas en el país por parte del Gobierno yemení, en la que además ha urgido a las partes a alcanzar un acuerdo según el cual el presidente dimita a cambio de inmunidad.

La aprobación del Consejo del proyecto de resolución propuesto por Reino Unido se ha producido nueve meses después de que comenzaran las protestas en el país, inspiradas por los levantamientos populares en Túnez, Egipto y Libia.

Así, el Consejo "condena con firmeza (...) el excesivo uso de la fuerza contra los manifestantes pacíficos" y agrega que "los responsables de la violencia, abusos de los Derechos Humanos y otros abusos deberán rendir cuentas". Asimismo, la resolución pide a Gobierno y oposición que "abandonen de manera inmediata el uso de la violencia".

Sin embargo, no ofrece detalles sobre cómo se alcanzará esta "rendición de cuentas" en caso de que se alcance un acuerdo de inmunidad para Salé y sus cercanos, tal y como ha propuesto el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) en su propuesta, según la cual los altos cargos del Gobierno yemení quedarían protegidos de las investigaciones y juicios contra ellos.

Sobre la implementación de la propuesta del CCG, la ONU ha afirmado que la transferencia de poder por parte de Salé y la formación de un Gobierno interino, así como la redacción de una nueva Constitución y la celebración de elecciones, "son esenciales para un proceso de transición política inclusivo, ordenado y liderado por Yemen".

Para ello, ha solicitado a todos los grupos de oposición que "se comprometan a jugar un papel constructivo en la firma e implementación" de la iniciativa y que abandonen la violencia y el uso de la fuerza para conseguir sus objetivos políticos.

La propuesta del CCG, que se inició en abril y fue firmada por la oposición en mayo, pide a Salé que se retire del poder en 30 días y que ceda las competencias al vicepresidente, Abd Rabbu Mansur Hadi, que conformará un Gobierno nacional liderado por la oposición y convocará elecciones presidenciales en un plazo máximo de 60 días. Salé ha aceptado la propuesta en tres ocasiones, aunque en todos los casos se ha retirado de la firma en el último momento solicitando garantías de inmunidad de Estados Unidos, la Unión Europea y el CCG.

Por otra parte, el Consejo ha mostrado su preocupación por la presencia en el país del grupo terrorista Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), rama regional de Al Qaeda, y por el riesgo de nuevos ataques terroristas en Yemen. Por ello, ha recalcado su determinación para combatir la amenaza de acuerdo con la Carta de Naciones Unidas y el derecho internacional.

Asimismo, ha pedido a la comunidad internacional que provea de ayuda humanitaria al país, que se enfrenta a un empeoramiento de la situación humanitaria, económica y de seguridad, según un comunicado colgado en la página web de la organización.