MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno español y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) firmaron hoy tres acuerdos de colaboración en virtud de los cuales España destinará 15 millones de euros a la educación básica e igualdad, a la protección de la infancia contra la violencia, explotación y el abuso y a la promoción de políticas y alianzas a favor de los derechos de los niños y niñas. Con ello, la aportación global española a UNICEF en 2006 asciende a más de 27 millones de euros, lo que supone una cantidad seis veces superior a la de 2005.
Estos acuerdos reflejan "el interés de los ciudadanos y del Gobierno español en trabajar juntos en favor de la infancia allí donde los niños y las niñas son más vulnerables, sin ninguna duda los países en conflicto y los más pobres", declaró tras la firma la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Leire Pajín. Al acto asistió la directora ejecutiva adjunta de UNICEF, Rima Salah.
La firma de los acuerdos coincide con la celebración anual de la primera comisión mixta, formada por las dos partes en virtud del acuerdo marco firmado en febrero de 2004 entre España y UNICEF, y que entró en vigor en marzo de 2005. El objetivo del acuerdo marco es "impulsar las relaciones entre ambas partes y mantener una colaboración continua en la ejecución de programas y actividades de cooperación", según informó la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) en un comunicado.
Los tres acuerdos firmados hoy implican que España participará en tres fondos fiduciarios de esta agencia de Naciones Unidas. Para hacer efectivos estos acuerdos, el Consejo de Ministros decidió el pasado viernes conceder 15 millones de euros, cinco millones para cada uno de los fondos. Estos fondos de UNICEF estarán destinados a tres áreas preferentes: Latinoamérica, África Subsahariana y Asia.
Aparte de los 27 millones de aportación global, España ha comprometido fondos para proyectos de ayuda humanitaria y de emergencia a UNICEF, en el primer semestre de 2006, de más de siete millones de euros.
LOS TRES ACUERDOS
El primero de los tres acuerdos firmados hoy corresponde al fondo fiduciario de educación básica e igualdad entre los géneros. "58 millones de niñas no van a la escuela en el mundo", destacó Leire Pajín. Este fondo está dedicado a la construcción de internados para niñas, la provisión de materiales de educación para las familias que escolaricen a sus niñas, la formación del personal docente, la creación de escuelas y las campañas de concienciación en determinados países para facilitar la escolarización de las niñas.
El segundo fondo en que el España participará está destinado a la protección de la infancia contra la violencia, la explotación y el abuso, y trabaja principalmente en el desarrollo de investigaciones y de indicadores para conocer el nivel de protección de los derechos de los niños en los países asociados y en la atención mínima a los niños sin protección familiar --incluida la búsqueda de alternativas a la detención--.
También está centrado en el apoyo a las acciones para eliminar el tráfico de niños, la explotación sexual, el trabajo infantil y la implicación en conflictos armados; y en el apoyo a las medidas legales para reducir la violencia física o psíquica contra los niños en el hogar y en la escuela.
El tercer acuerdo, relativo al fondo fiduciario para promoción de políticas y alianzas a favor de los derechos de la infancia, tiene por objetivo poner a la infancia y la reducción de la pobreza en el centro de las agendas políticas y económicas de los países en desarrollo.
Según Leire Pajín, "la actuación de la cooperadción al desarrollo española presta una especial atención a los sectores más vulnerables y en situación más cercana a la exclusión", en particular "a la infancia y a las mujeres". "Las niñas son las más excluidas de los excluidos", aseveró.
"OCASIÓN HISTÓRICA"
Por su parte, Rima Salah calificó de "ocasión histórica" la firma de los tres acuerdos y aseguró que el organismo hará "la mejor utilización" de los fondos aportados por España para "llegar a los niños de todo el mundo, sobre todo a las comunidades y a las familias, para conseguir un cambio en los comportamientos sin el cual no pueden conseguirse futuros mejores para ellos".
Asimismo, la directora ejecutiva advirtió de que los Objetivos del Milenio de Naciones Unidas "nunca se podrán alcanzar si no se llega a cada niño y a cada mujer, a los grupos aislados por la pobreza extrema y a los que sufren conflictos armados" y recordó que en 2007, declarado Año Internacional de las Niñas por la UNICEF, habrá que "volcarse para reforzar el apoyo a las niñas en todo el mundo".