España.- Moratinos considera "difícil de concebir" una política exterior en el siglo XXI que no atienda a la cooperación

MADRID 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, expresó hoy la satisfacción de su departamento por la labor en cooperación efectuada por el Gobierno a lo largo de 2005 y destacó su compromiso de integrar la ayuda en la su política de su Ministerio, ya que "difícilmente podemos concebir una política exterior en un país moderno, del siglo XXI, sin atender a la cooperación".

El ministro intervino hoy con motivo de la reunión de coordinadores generales de cooperación y de directores de centros culturales y de centros de formación, que se celebra en la sede de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) en Madrid.

Durante su intervención, Moratinos destacó los resultados de la política de cooperación en 2005, en particular la reforma de la AECI puesta en marcha en 2005, el fomento de una estrategia de ayuda al desarrollo "cimentada sobre el diálogo" y los avances en el proceso de identificación e integración de la cooperación en el marco de la política exterior, gracias a un Plan Director consensuado por los diversos actores implicados.

La cooperación es "esencial" en la política exterior española, aseguró. "Difícilmente podemos concebir una política exterior en un país moderno, del siglo XXI, sin atender a la cooperación", añadió.

Moratinos destacó también la importancia de la incorporación, por parte de la AECI, de los llamados "nuevos instrumentos de cooperación", como las aportaciones a fondos globales, los apoyos presupuestarios y los enfoques sectoriales. Por ello, señaló, las Oficinas Técnicas de Cooperación (OTC) "van a tener que asumir más responsabilidades y más competencias", ya que "van a recibir más presiones" para responder adecuadamente a estos nuevos instrumentos de cooperación.

España se ha convertido en un referente de la comunidad internacional en la lucha contra la pobreza, afirmó Moratinos, que destacó la ampliación de las fronteras de la cooperación española a nuevos países, como Afganistán.

Asimismo, el ministro valoró la implicación de España en el desarrollo de los "ámbitos tradicionales" de la cooperación española, como América Latina y los países del norte de África. Según datos aportados por el propio ministro durante la reunión de hoy, en América Latina la cooperación presupuestada, sin incluir la deuda, crecerá en 2006 casi un 40 por ciento y alcanzará cerca de los 200 millones de euros.

En el norte de África, según los mismos datos, las cifras serán similares debido a que se ha multiplicado por cuatro la asistencia a los refugiados saharauis. Asimismo, la ayuda a la Autoridad Palestina ha crecido un 40 por ciento y la colaboración con Marruecos ha aumentado exponencialmente.

Aparte, Moratinos destacó la necesidad de centrar la ayuda fundamentalmente en África, y fundamentalmente en África subsahariana, como quedó de manifiesto, indicó, en su reciente gira por Angola, Mozambique, Níger, Nigeria, Mali y Ghana.

APORTACIÓN ECONÓMICA, DEUDA Y FAD

Por su parte, la secretaria de Estado de Cooperación y presidenta de la AECI, Leire Pajín, aseguró que la aportación española a la ayuda al desarrollo será en 2006 de 3.200 millones de euros, el 0,33 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), y destacó al respecto que en 2005 España dedicó 23 millones de euros a los nuevos instrumentos de cooperación y anunció que en 2006 la cifra se doblará, hasta los 47 millones.

Asimismo, aseguró que España ha experimentado un incremento "significativo" en la financiación de los organismos internacionales, con especial hincapié en los más directamente relacionados con los Objetivos del Milenio de la ONU, como el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), y en los que trabajan por los Derechos Humanos, con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) o la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Leire Pajín valoró la participación española en actividades "innovadoras", como la Iniciativa contra el Hambre, promovida por el presidente de Brasil, Luiz Ignacio 'Lula' da Silva, y por el secretario general de la ONU, Kofi Annan, y en que la también se han implicado países como Francia, Italia, Reino Unido o Suecia.

Por otra parte, la secretaria de Estado destacó la importancia de complementar la ayuda al desarrollo con "políticas de coherencia" en o otros ámbitos que tienen impacto con el desarrollo, como el alivio de la deuda externa y los créditos del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD).

España está en "una posición avanzada internacional respecto al alivio de la deuda de los países sobreendeudados de renta media y baja", aseguró Pajín, que destacó la política de canje de deuda por desarrollo (sobre todo por educación) acordada con países como Ecuador, Honduras, Nicaragua o El Salvador.

Asimismo, respecto a los FAD, la secretaria de Estado destacó que el Ministerio de Asuntos Exteriores tenga previsto, en 2006, tomar la iniciativa en el desembolso de hasta 330 millones de euros para proyectos de desarrollo, para aportaciones a los organismos internacionales o para fondos fiduciarios.