MADRID 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente ruso, Vladimir Putin, se comprometió hoy a impulsar la investigación del reciente apaleamiento que sufrió el director general de la compañía Fargoil --filial de Yukos--, Antonio Valdés-García, quien cuenta con la doble nacionalidad rusa y española.
Valdés-García necesitó una prolongada hospitalización en Moscú a raíz de sufrir en agosto de 2005 una brutal paliza que le provocó numerosas fracturas en su cuerpo. Putin dijo no estar enterado del caso, pero dio su visto bueno a que se aclaren las causas de este ataque y quién le golpeó.
"Daré las instrucciones pertinentes a la Fiscalía y recibiré la información pertinente. Me enteraré de lo que ha pasado y si hay la menor alusión a un asunto criminal, éste será investigado", dijo al término de su reunión con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Palacio de la Moncloa.
Zapatero aprovechó la pregunta para subrayar que el Ejecutivo, y más concretamente el Ministerio de Asuntos Exteriores, ha entablado conversaciones con las autoridades rusas sobre la situación de este ciudadano.
"Hemos obtenido una buena disposición por parte del Gobierno ruso. Puede haber alguna discrepancia sobre la nacionalidad, pero en todo caso como acaba de explicitar de una manera clara el presidente Putin, ambos Ministerios de Exteriores van a seguir trabajando para determinar los hechos y, en su caso, aclarar lo que puedan ser esa diferencia de interpretación en la nacionalidad de este ciudadano", explicó.
Las autoridades rusas detuvieron en junio del pasado año en un aeropuerto ruso a este director general de la compañía Fargoil. Previamente, agentes de la Fiscalía requisaron abundante documentación en la sede de Yukos en el marco de una investigación sobre la presunta apropiación indebida de 1.060 millones de dólares por parte de directivos de Yukos en 2001 a través de Fargoil.
Los responsables de Yukos utilizaron Fargoil, al parecer, para transferirle los fondos robados de las cuentas de Yukos como supuestos pagos por servicios de consultoría. La Fiscalía acusó a los responsables de Yukos de sacar de Rusia un total de 6.000 millones de dólares en el periodo 2000-2006 a través tanto de Fargoil como de otra compañía con sede en un paraíso fiscal.