Un informe le sitúa entre los países en los que se prevé un descenso del número de maestros
BRUSELAS, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
España necesitará incrementar el numero de profesores de su sistema educativo en unos 23.000 para el año 2015, de manera que se pase de los 179.000 que se calcularon en 2004 a los 202.000 que se estimarán necesarios, según un informe de la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) sobre la situación de los enseñantes en el mundo que se presentó hoy.
El informe toma mucho más en cuenta la situación de los profesores -su calidad y cantidad- en los países en vías de desarrollo y se detiene sólo por encima en la Europa occidental y América del Norte, que es la región que menos problemas presenta.
Sin embargo, indica que España, Irlanda y Estados Unidos son los países dentro de ella que sí necesitarán aumentar el número de profesores, aunque considera que "parece que esta necesidad podría arreglarse con el redespligue de profesores o la reducción de las tasas de desgaste".
El informe indica que España forma parte de 76 países en todo el mundo que "tendrán que ampliar sus fuerzas de enseñanza" en 2005, como también ocurre en países como la mayoría de los países subsaharianos y del sur y del este de Asia, que juntos tendrán que crear 2.700.000 nuevas plazas de profesores, de los cuales 1,6 millones serán solo para África subsahariana. El informe cuantifica las necesidades españolas en 23.000 nuevos maestros.
Además, la UNESCO también cita a España entre los países donde, al contrario que sus necesidades, está previsto que descienda el número de profesores y que, por lo tanto, "tendrán la necesidad de hacer nuevos contratos o desplegar profesores de una manera diferente". El informe también señala dentro de este grupo a Luxemburgo, Irlanda, Estados Unidos, Paraguay, Uruguay o Guatemala.
Estos datos forman parte del informe que presentó hoy la UNESCO -también en Nueva York- sobre la situación de la enseñanza en todo el mundo en base al número y las condiciones en las que trabajan los profesores en los distintos países.
El objetivo último era hacer un análisis de cuál es la situación actual, teniendo en cuenta el compromiso de cumplir uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio que indica que en 2015 la enseñanza primaria tiene que ser universal.
Sin embargo, el director de Educación Superior de la UNESCO, Georges Haddad, constató hoy que el informe contiene datos "para comprender la gravedad del problema de los profesores" en todos los regiones del mundo, no solo en los situados al sur, sino también en el norte rico.
En términos generales, el informe concluye que existen tres grupos de países en el mundo atendiendo a las condiciones de los profesores dentro de los sistemas de enseñanza, pero que incluso en los países donde la situación es aparentemente mejor -mayoritariamente en la Europa occidental- se lanza la advertencia de que la calidad y la cantidad de la educación no debería perderse de vista como prioridad.
Por otra parte, muchos países registran serios problemas para financiar el sistema educativo que necesitan, para formar a profesores y el informe advierte que los Gobiernos deberían no perder de vista los "costes ocultos" que comporta la pérdida de profesores, a los que, asimismo, debería darse "incentivos monetarios" para mantenerlos y para promover que los jóvenes quieran dedicarse a esta profesión.
Durante la presentación del informe también intervino Fred van Leeuwen, secretario general de la Internacional de la Educación, una asociación de asociaciones que en total engloba a la mitad de los aproximadamente 60 millones de profesores que hay en el mundo.
Van Leeuwen lanzó un llamamiento a los Gobiernos para que hagan una "mejor" planificación de los sistemas de enseñanza. "Aparentemente no hay la suficiente disposición política de los Gobiernos a tomarse esta cuestión en serio", dijo.
Señaló que "la primera prioridad tiene que darse en la formación de profesores", que, entre otras cosas, sean capaces a motivar a los jóvenes para continuar con su educación -tanto en el Norte como en el Sur_ e, incluso, a convertirse en maestros.
También se refirió a una situación que es más característica de los países del sur, el hecho de que "el 70%" de los profesores viven por debajo del umbral de la pobreza, lo que hace que tengan que tener un segundo oficio para sobrevivir y que también tiene consecuencias negativas en la calidad de la enseñanza, dijo.
En tercer lugar, consideró que la calidad de la enseñanza disminuye también debido al recurso que muchos países pobres hacen de los "profesores voluntarios", que no tienen ninguna formación
