PEKÍN 28 Jun. (Reuters/EP) -
Un exdirigente regional del Partido Comunista chino (PCCh), implicado en un escándalo sexual que ha recorrido todo el país, ha sido condenado este viernes a 13 años de prisión por aceptar sobornos, ha informado la agencia de noticias Xinhua.
Un vídeo subido a Internet el pasado mes de noviembre y visto por más de medio país muestra cómo Lei Zhengfu, exsecretario del partido en la región de Chongqin, mantenía relaciones sexuales con una joven de 18 años.
El vídeo formaba parte de una operación encubierta llevada a cabo por un promotor inmobiliario con la finalidad de chantajear a Lei, de 55 años, para que en determinadas decisiones comerciales el exsecretario del PCCh fuera favorable a su empresa, según los medios chinos.
Lei fue despedido y condenado, el mes pasado, por corrupción lo que podría conllevar una pena máxima de muerte. También ha sido condenado a pagar una multa de 300.000 yuanes (37.000 euros). La rápida actuación por parte del Gobierno chino en el caso de Lei es un indicador del incremento del interés por parte de la ciudadanía hacia el partido, y de su descontento con el excesivo abuso de poder que ejercen sus dirigentes y la impunidad bajo la que se encuentran.
CORRUPCIÓN EN CHINA
Seis personas han sido condenadas por el tribunal de Chongqin el pasado mes, por trabajar conjuntamente en la grabación de vídeos privados de diferentes dirigentes manteniendo relaciones sexuales para poder chantajearlos después.
Durante el mes de enero, diez dirigentes del Gobierno y directores de empresas estatales fueron despedidos tras haber sido grabados manteniendo relaciones, según Xinhua. Los dirigentes del PCCh tienen totalmente prohibido tener amantes, por lo que estos vídeos han simbolizado los excesos cometidos y la corrupción que existe dentro de la élite gobernante.
Consciente de la indignación pública y de la advertencia de una corrupción que amenaza la propia supervivencia del partido, el presidente Xi Jinping se ha comprometido a tomar medidas para acabar con esta situación a todos los niveles, a pesar de que sólo un pequeño número de dirigentes veteranos han sido despedidos o investigados desde que llegó al poder el año pasado.