MANILA, 25 Feb. (Reuters/EP) -
Filipinas ha convocado este martes al encargado de negocios chino en Manila, Sun Xiangyang, para presentarle una "fuerte protesta" contra los intentos de China de prohibir a los pescadores filipinos faenar en las aguas en disputa del mar de China Meridional, según ha informado el portavoz del Ministerio de Exteriores filipino, Raúl Hernández.
Hernández ha criticado al Gobierno chino por "prohibir a los pescadores filipinos llevar a cabo sus actividades pesqueras en el arrecife filipino de Bajo de Masinloc", también conocido como el arrecife de Scarborough, donde el pasado 27 de enero las autoridades chinas recurrieron a cañones de agua para detener un barco pesquero.
"Instamos a China a que respete nuestra soberanía y los derechos de nuestros pescadores", ha advertido Hernández, que asegura que los pescadores que se encontraban en el arrecife simplemente estaban refugiándose del mal tiempo en la zona.
"Esas acciones, esos incidentes seguramente aumentarán la tensión en la zona. Y además, esto amenaza la paz, la seguridad y la estabilidad de la región", ha añadido.
REACCIÓN DE CHINA
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Hua Chunying, ha rechazado esta reclamación y ha asegurado que los barcos chinos patrullan la región con el objetivo de proteger la soberanía de su país y asegurar el "orden normal".
"China no acepta esas representaciones o protestas de Filipinas", ha asegurado Hua durante su rueda de prensa diaria en Pekín. "Para (la entrada de) los barcos extranjeros en estas aguas, China está llevando a cabo las gestiones necesarias de forma apropiada y razonable", ha añadido.
En este sentido, Hua ha pedido a Filipinas que respete "la soberanía de China y que no provoque nuevos indicentes". Desde comienzos de 2014, China ha exigido a los barcos pesqueros extranjeros una autorización para faenar en las aguas que reivindica como propias.
REIVINDICACIONES EN EL MAR
El pasado 27 de enero, la Guardia Costera china intentó hacer retroceder un barco pesquero filipino del arrecife de Scarborough para lo que hizo uso de sus cañones de agua, según denunció el jefe del Estado Mayor de la Defensa de Filipinas, el general Emmanuel Bautista este lunes.
China reclama en torno al 90 por ciento de los 3,5 millones de kilómetros cuadrados de superficie marítima, donde se concentra el 10 por ciento de la pesca mundial y donde el transporte comercial supone un ingreso de cinco billones de dólares anuales.
Asimismo, se estima que la zona es rica en gas y petróleo. Taiwán, Malasia, Filipinas, Brunéi y Vietnam también reclaman partes de estas aguas.
El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, ha pedido al Gobierno chino que aclare qué es exactamente lo que ha ocurrido. "No estamos seguros, en este punto, de que podamos decir si ha sido un procedimiento operacional normal", ha advertido. Exteriores ha recordado que ya hubo nueve incidentes similares en la misma región durante el año pasado.
CÓDIGO DE CONDUCTA MARÍTIMA
Filipinas ha instado a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés) a que termine un código de conducta vinculante con China para evitar accidentes en las aguas en disputa.
En este sentido, Manila ha pedido que su disputa con China sea llevada bajo arbitraje de la Convención de Naciones Unidas sobre Derecho Marítimo, pero Pekín se ha negado a participar en el caso. El Gobierno chino ha rechazado cualquier intento de desafiar su soberanía y ha acusado a Filipinas de provocar tensiones entre ambos países a través de la ocupación de territorios chinos en estas aguas.
Este mes, el comandante de la Marina de Estados Unidos declaró que ayudaría a Filipinas si finalmente hubiera un conflicto con China en torno a las aguas en disputa.