GINEBRA, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) lanzó hoy un llamamiento de emergencia por 8,8 millones de francos suizos (5,5 millones de euros) para apoyar a la Cruz Roja Filipina a prestar asistencia a las 200.000 personas que se han visto afectadas por el paso del tifón 'Durian' la semana pasada por el este del archipiélago, además de otras tres tormentas que han dejado a su paso destrucción en Filipinas desde finales de septiembre.
El tifón, acompañado de fuertes vientos y lluvias, golpeó el este de Filipinas el jueves pasado, dejando a su paso graves inundaciones y corrimientos de tierra. Al menos 300 personas murieron y otras 400 se encuentran desaparecidas, mientras que otras 500 resultaron heridas. Asimismo, se estima que al menos 600.000 personas se han visto afectadas por el tifón, señala la FICR en su comunicado.
"Mucha gente está sin un techo sobre sus cabezas o no tiene acceso a servicios esenciales", indicó el presidente de la Cruz Roja Filipina, Richard Gordon. "Tenemos que trabajar para romper este ciclo de sufrimiento y vulnerabilidad combatiendo la pobreza y mitigando el daño de los desastres", añadió.
Desde el viernes, los voluntarios locales de la Cruz Roja han prestado asistencia a unas 9.000 personas, sobre todo alimentaria. Se espera que hoy se distribuya ayuda similar a otras 7.500 personas, mientras que la Cruz Roja Filipina se prepara para distribuir bienes no alimenticios y mantas a unas 40.000 personas.
Por otra parte, la Federación anunció que tiene previsto enviar a dos equipos de evaluación especializados a la región afectada con el fin de valorar el alcance de los daños y el mejor medio para cubrir las necesidades de las personas más vulnerables afectadas por el tifón.
"Las personas que se han visto más afectadas son las más pobres", lamentó Roger Bracke, responsable de la delegación de la Federación Internacional en Filipinas. "Los que más sufren son los que viven demasiado cerca de los ríos o la costa, en casas que no están preparadas para aguantar una tormenta tras otra, por lo que es especialmente importante reforzar su resistencia de cara a futuros desastres", subrayó.
