PARIS 6 Jun. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -
El Gobierno francés regularizará en breve a los niños 'sin papeles' que estén escolarizados en Francia, así como a sus familias, tras varios casos polémicos en que escuelas y padres de alumnos han protestado para evitar la expulsión del país de varios pequeños.
Las condiciones exigidas por el ministerio del Interior para proceder a la regularización, según anuncia 'Le Figaro', serán que los pequeños hayan nacido en Francia, que hayan estado siempre escolarizados y que no hablen la lengua del país de origen de sus progenitores.
Esta medida afectará a unas 800 familias pendientes de expulsión pero con hijos escolarizados en Francia. En total, unos 1.200 extranjeros indocumentados accederán al permiso de residencia para que sus hijos puedan seguir estudiando en Francia.
Una comisión con representantes escolares, del Ministerio de Educación y de Interior, y de asociaciones decidirá "caso por caso" si se debe proceder a la regularización. Sin embargo, el Ministerio ejecutará la orden de expulsión, al término de este curso escolar, para aquellos que no cumplan los requisitos exigidos.
Una asociación, llamada Red de Educación sin Fronteras (RESF), ha conseguido movilizar a la comunidad educativa y despertar la atención de los medios de comunicación sobre los casos de varios pequeños, que estaban a punto de ser explusados, al ejecutarse la repatriación de sus progenitores.
Este grupo criticó hoy la decisión del ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, que, en su opinión, pretende ser únicamente "un efecto de anuncio" para acabar con una polémica que crece por momentos, a pocas semanas de que se efectúen las expulsiones.
Las asociaciones en defensa de los sin papeles calculan que hay unos 10.000 jóvenes escolarizados en Francia cuyas familias son expulsables, por lo que la medida del Gobierno afectaría a menos de un diez por ciento del total.