PARIS, 30 May. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -
La localidad de Montfermeil (al norte de París) fue escenario, la pasada madrugada, de violentos enfrentamientos entre un centenar de jóvenes, encapuchados y armados con bates de béisbol, y la Policía. Siete agentes resultaron levemente heridos y tres personas fueron detenidos por enfrentarse a las fuerzas del orden.
El origen de los disturbios fue la detención, en la tarde de ayer, de un joven del barrio de Bosquets, uno de los más depauperados de la localidad, como posible autor de la agresión contra un conductor de autobús, hace dos semanas.
Fue el testimonio del alcalde de Montfermeil, Xavier Lemoine (UMP, conservador), testigo de la agresión, lo que permitió a la Policía identificar, localizar y detener al supuesto maleante. Poco después de su arresto, un centenar de jóvenes empezó a provocar altercados frente al domicilio del alcalde, contra el que lanzaron piedras.
En su interior se encontraban la esposa de Lemoine, que ha tenido que ser escoltado en los últimos meses por las amenazas recibidas por las bandas de la localidad, y sus hijas. El alcalde afirmó a medios galos que los disturbios demuestran que su vida y la de su familia están "amenazadas".
Unos 250 agentes de las fuerzas del orden (150 de ellos, de las unidades antidisturbios) se desplegaron en la localidad y tardaron cuatro horas en devolver la calma al barrio. Durante ese tiempo, los jóvenes lanzaron objetos y piedras a la policía, y provocaron numerosos destrozos.
La Alcaldía de Montfermeil resultó dañada, después de que varios encapuchados lanzasen dos cócteles Molotov en su interior, así como otro edificio público, también incendiado. Los jóvenes prendieron fuego a cuatro vehículos. Disturbios parecidos, aunque de menor intensidad, se registraron también en la localidad periférica de Clichy.
Este tipo de enfrentamientos y de desórdenes públicos estallaron en cientos de barrios marginales de Francia durante el pasado mes de noviembre, tras la muerte accidental de dos jóvenes que huían de un control policial.
Ante la violencia que creaban las bandas de jóvenes en Montfermeil, Xavier Lemoine publicó un decreto el pasado 7 de abril por el que se impedía la circulación nocturna por la calle de más de tres menores, de entre 15 y 18 años. Una medida que después fue prohibida por los tribunales.
