MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno afgano ha anunciado este sábado que las conversaciones directas con los insurgentes talibán comenzarán dentro de dos semanas siempre y cuando el grupo dé su visto bueno, según recoge la cadena Tolo News.
Estas negociaciones cara a cara suponen un paso trascendental en los diálogos de paz para el país centroasiático ya que los talibán, durante las últimas semanas de conversaciones preliminares con Estados Unidos, se habían negado hasta ahora a reconocer a las autoridades de Kabul como un interlocutor legítimo.
El anuncio del plazo ha sido realizado por el titular del recién inaugurado Ministerio de Estado para los Asuntos de Paz, Abdul Salam Rahimy, quien ha apuntado que las conversaciones tendrán lugar en una ciudad europea que podría ser Oslo, la capital de Noruega, según fuentes de la agencia Reuters.
Si todo marcha según lo previsto, a las conversaciones acudirá una delegación de negociadores del Gobierno afgano compuesta por 15 miembros, entre los que se incluirán elementos cercanos a las conversaciones entre los talibán y EEUU celebradas en Doha (Qatar), eruditos religiosos, mujeres y destacados miembros de la sociedad civil.
Este mismo sábado, el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, ha emitido un decreto ejecutivo por el cual disuelve la antigua organización negociadora del Gobierno afgano, el Alto Consejo de Paz, para dar paso a este ministerio, en el marco de los contactos de Estados Unidos con los talibán para explorar un nuevo diálogo.
El Alto Consejo de Paz fue creado por el anterior presidente, Hamid Karzai, en 2010 para negociar con los insurgentes afganos en un proceso que finalmente naufragó. De hecho, el ex presidente afgano Burhanuddin Rabbani, que fue el primero en dirigir el Alto Consejo de Paz, fue asesinado en un atentado perpetrado contra su casa en 2011.
Ghani ha optado por elevarlo a rango de ministerio mientras se suceden los contactos entre Estados Unidos y los talibán, que hasta ahora se han negado a hablar directamente con el Gobierno afgano porque consideran que es una "marioneta" de la Casa Blanca.
